Una ola de calor procedente de África está a punto de entrar en la península y azotará especialmente al Valle del Ebro a partir del próximo jueves. La cosa no es para tomárselo a broma. Además de las clásicas incomodidades, las altas temperaturas representan un riesgo para ciertos colectivos más vulnerables, como las personas mayores o los niños.
Por ello, desde SOS Rioja han emitido las siguientes recomendaciones para que la ola de calor tenga el menor efecto posible sobre la salud:
– Evite salir de casa durante las horas centrales del día.
– Beba más líquidos (agua y zumos de fruta ligeramente fríos) y no espere a tener sed.
– Evite las comidas copiosas: coma menos cantidad y más veces al día.
– No tome comidas calientes ni abuse de las bebidas alcohólicas.
– Reduzca la actividad física.
– Descanse con frecuencia a la sombra.
– Use ropa de tejidos naturales, ligera, holgada y de colores claros.
– Utilice sombrero, gafas de sol y cremas protectoras solares.
– Permanezca en espacios ventilados o acondicionados.
– Cuando esté en casa, utilice las habitaciones más frescas.
– Durante el día baje las persianas y cierre las ventanas; ábralas por la noche para ventilar.Mantenga los alimentos en el frigorífico y vigile siempre las medidas higiénicas.
– Cuando estacione el coche no deje en el interior a niños ni ancianos con las ventanillas cerradas.
– Ayude a las personas que puedan estar en mayor riesgo de sufrir los efectos del calor:
– Personas mayores, discapacitados y niños menores de cinco años.
– Personas con enfermedades crónicas: hipertensión, diabetes, cardiopatía, obesidad, …)
– Personas que realizan trabajos físicos intensos o deporte al aire libre
Cómo actuar
No obstante, por si las recomendaciones no hicieran efecto y alguna persona cercana sufriera un golpe de calor, el servicio de emergencias riojano ha emitido el siguiente protocolo para saber cómo actuar:
– Llame inmediatamente al teléfono único de emergencias 1-1-2.
– Coloque al enfermo en un lugar a la sombra.
– Quítele ropa para airearle.
– Si está consciente, colóquele con la cabeza ligeramente elevada y ofrézcale abundante agua.
– Refrésquele con agua fría o hielo, sobre todo la cara y axilas.
– No le meta en la bañera para enfriarle.
– Si está inconsciente, colóquele tumbado de lado, con las piernas flexionadas.
– Nunca ofrezca líquidos a una persona inconsciente