Las vacaciones de verano no significan solo ‘temporada alta’ para los hosteleros. Conscientes de que muchas viviendas se quedan vacías durante un tiempo, los ladrones permanecen en alerta en busca de las viviendas que le generen menos trabas para acceder a su interior y hacerse con su botín.
Porque hay algo en lo que los expertos en seguridad coinciden: no existe la cerradura indestructible, sino la cerradura que mejor se adapta a tus necesidades y a los riesgos que deseas cubrir. Por ello, cada año cuando se acercan estas fechas conviene refrescar algunos consejos que incrementan la seguridad en tu hogar.
No publicar en las redes sociales nada que pueda dar pistas de que te encuentras lejos de casa, simular que la vivienda está ocupada encargando a alguien que encienda y apague luces o abra las persianas… Son recomendaciones que nunca está de más tener en cuenta, pero la tecnología siempre está ahí para facilitar las cosas.
Y ahí es donde entra en juego, tal y como subrayan en Freijo, “un enfoque más novedoso, más técnico, para convertir el acceso a la vivienda en una ‘puerta sensible al ataque'”. Se refieren los expertos en cerrajería al concepto de ‘Detección Anticipada del Robo’, que “nos aporta una tranquilidad extra mientras estamos lejos de casa, disfrutando de nuestro tiempo de ocio”.
Ganar tiempo de reacción
“Se trata de que la la puerta de nuestra casa nos avise de que alguien está intentando entrar y, lo más importante, mientras el ladrón se encuentra fuera del hogar, al contrario de lo que sucede con una alarma convencional”. Y es que en el ámbito de la seguridad el tiempo es oro y los ‘invasores’ priorizan las viviendas en las que sus sistemas de seguridad permiten un acceso más rápido.
Mediante sistema, el escudo (el elemento que protege el bombín) incorpora un circuito electrónico que al ser atacado -y solo al ser atacado envía una señal que activa una alarma a un dispositivo en el interior de la vivienda. Esto proporciona al menos veinte minutos de resistencia ante el ataque de los ladrones en los que la alarma ya ejerce de elemento disuasorio, emitiendo señales acústicas a 90 decibelios.
Por si fuera poco, el sistema permite enviar inmediatamente un mensaje de texto al teléfono del propietario de la vivienda, lo que le permite estar prevenido ante un posible robo y actuar en consecuencia. Otra de sus ventajas radica en que permite añadir otros elementos para, de este modo, crear un sistema de alarmas independiente de empresas externas, lo cual contribuye a abaratar costes y a configurar una red de seguridad perfectamente adaptada a nuestro hogar.
Por todo ello, el mejor consejo que cualquiera puede atender antes de salir de vacaciones es ponerse en manos de los profesionales en seguridad para que este verano tu única preocupación sea que no se te derrite el hielo del mojito.
