‘Pescados Insausti’ y NueveCuatroUno tienen algo en común. No, no es que su sede principal se localice en Logroño, que también, pero es más bien que ambos comparten una efeméride: el 13 de abril. En un caso porque fue el arranque hace cuatro años como medio digital, en el otro porque coincide con la fecha de inauguración, en 1994, de su actual emplazamiento: en la esquina de la calle González Gallarza con El Peso.
Son sus bodas de plata en la ubicación actual, pero no de su trayectoria despachando pescado. “Nos estrenamos en esta esquina, a pie de calle, hace 25 años, pero la historia de ‘Pescados Insausti’ va más allá”, reconoce orgullosa Cristina Insausti, actual propietaria del negocio.
La joven (31 años) se ha criado prácticamente en este lugar, entre pescado, y siempre le ha gustado la actividad de la pescadería. “Yo soy la cuarta generación. Nuestro origen es de San Sebastián, donde comenzaron con el tema del pescado en 1942, luego mis abuelos se vinieron a Logroño y mi abuela tuvo una pescadería en Rodríguez Paterna”, explica. Después su padre siguió con la actividad en la Plaza de Abastos hasta que en un momento dado decidieron mudarse fuera de ella, en el mismo edificio. Desde hace diez años Cristina trabaja tras el mostrador.
“Las cosas han cambiado mucho, antes se compraba con mucha alegría todo, hoy se mira más”, admite Cristina mientras que atiende a varios clientes fijos. Es sábado por la mañana, uno de los mejores momentos de venta. En términos anuales, las épocas más fructíferas son Navidad y agosto. “En las navidades es obvio, por las celebraciones, y lo del verano suele coincidir con las fiestas de los pueblos, etc. Así como julio no es muy bueno, agosto sí”, precisa.
Respecto a los productos, pocas novedades. “Se viene a ofrecer siempre lo mismo: calidad, fresco, prácticamente todo del Cantábrico, y con productos de temporada como ahora las anchoas”, añade Insausti, que aclara que su actividad no se limita solo a la pescadería, también tienen puesto de mayoristas en MercaRioja.
Sin embargo, sí que está variando el tipo de clientela y sus necesidades. “Además de la de toda la vida, se está incorporando gente joven, que se preocupa por la alimentación, que te pregunta muchos detalles sobre el pescado: si es salvaje, características, etc.”, apunta Cristina. Son los nuevos tiempos, los del conocimiento.
Y en este tono de satisfacción sale un deseo de su boca: “Ojalá cumplamos muchos años juntos, NueveCuatroUno”. Ojalá.
