La Rioja

Agroecología e historias de gallinas sensibles, en la feria ecológica

Lo ecológico ya no es suficiente, al menos para un determinado sector productivo. “Queremos tender a lo agroecológico, al proceso integral, es decir, a un sistema sostenible: ser productores y también vender; una búsqueda del origen, más ecología…”, asegura Andrés Serrano, presidente del Consejo de la Producción Agraria Ecológica de La Rioja (CPAER).

Este ha sido uno de los aspectos tratados estos días en el XIII Congreso Internacional de Agricultura Ecológica de SEAE que ha acogido Logroño, y en la que han participado más de doscientas personas de Europa y América Latina, en especial, de “Latinoamérica, donde cada día se produce más en ecológico”, destaca Serrano. Y es que este congreso ha sido sobre todo un punto “de recapitulación, de ver hacia dónde vamos, si tendemos simplemente a la agricultura convencional pero ecológica o hacia algo distinto. Ya no vale simplemente lo ecológico”, recalca el presidente de CPAER.

Y eso que todavía queda mucho por hacer en lo referido al consumidor. “España es el primer productor europeo de ecológico y el quinto en consumo, producimos para los demás…”, según indica Serrano.

En el contexto del congreso y con la concepción de incrementar el consumo es donde ha tenido lugar la ‘Feria de Alimentos Ecológicos de La Rioja’, este viernes, en Riojafórum, organizado por la Consejería de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, en colaboración con el Consejo de la Producción Agraria Ecológica de La Rioja (CPAER).

Primera feria profesional 

Y en la feria es donde ha estado NueveCuatroUno, recorriendo los 34 puestos de productos ecológicos que han poblado el hall de Riojafórum. Tras un primer contacto una sensación se repite: no ha habido gran asistencia de público. No era para cualquiera, se trataba de una jornada profesional, destinada a generar sinergias, contactos entre operadores y empresas de distribución, prescriptores, etc. Pero no son tan numerosos en el entorno próximo riojano.

Sin embargo, en lo referido a la variedad de productos que se exponen resulta interesante la asistencia: vino, aceite, conservas, frutas y hortalizas, frutos secos, los embutidos, huevos, miel, panadería y azafrán; provenientes de toda la región.

Hacemos una parada en La Rioja Alta, en Tormantos, con la conocida firma de ‘Huerta de Tormantos’ que hace cuatro años que dieron el paso de producir en ecológico. “De momento solo es una parte, pero cada vez se va a ampliando más: todo es manual, en terrenos propios; somos productores y elaboradores”, explica María Buda, trabajadora de la firma riojalteña que suma 25 años de historia.

Si algo distingue a estos pimientos ecológicos, de la variedad de pimiento narejano en tiras, es “el sabor, son muy parecidos a lo que se hacía antaño”, admite. Pero todavía queda mucho por avanzar. “Aquí, en La Rioja y en España, todavía cuesta introducirse, cada vez está más mentalizada la parte productora y de ventas, pero falta la del consumo de ecológico”. ¿El precio es mucho mayor? “La diferencia de precio no es tan alta como se podría pensar y eso que este tipo de producción es más costosa”, concluye María Buda.

María Buda, de Huerta de Tormantos.

A su lado Laura Lahera expone huevos ecológicos de su granja, bajo la marca BioPío. “Hace tres años nos lanzamos a este sector, tanto por la concepción ecológica como por el nicho de mercado, porque además de la idea romántica, sostenible y saludable de la producción ecológica también está la económica, no dejamos de ser negocios”, subraya.

Laura es la encargada de estar en la granja y de la administración, es directa y muy amena mientras explica cómo se ha gestado su granja con 700 gallinas. “Las tenemos al aire libre, en una finca en el Camino Viejo de Alberite, al lado de Logroño. Todo lo que toman es ecológico: el suelo está certificado como tal, el pienso, todo…”, apunta. Porque si algo queda claro tras hablar con ella es que “estamos muy muy controlados, tenemos análisis, registros…”.

Laura Lahera y José Miguel Martínez, de BioPío.

Aunque Lahera no está sola, el proyecto es conjunto con su marido José Miguel Martínez, quien se ocupa de la parte comercial y de la distribución. Su venta está destinada íntegramente a restaurantes, tiendas y bares de La Rioja. Pero no ha sido un proceso sencillo: “No teníamos experiencia en el sector, ha sido cuestión de leer, de prueba-error, etc.”, reconoce Laura.

Y, ¿cuántos huevos producen estas gallinas? “Las que tenemos son de la raza broiler y en ecológico producen unos seis huevos a la semana; las que están en los sistemas de producción convencional suelen ser uno al día. Pero las nuestras están sueltas, son sensibles, se estresan fácilmente”. ¿Se estresan? “Sí, sí, con cualquier ruido se alteran y si hay algún ruido durante la noche, que es cuando producen el huevo, les afecta”. Estando tan cerca de Logroño, es imposible no hacer la última pregunta. ¿Y qué pasa con los fuegos artificiales de San Mateo? Laura ríe. “La verdad es que esos días trasnochan un poco más de lo normal, les tenemos que mantener despiertas hasta que pasan los fuegos para no romperles las horas de sueño”. Cosas de la vida misma.

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