La gasolina le ha durado hasta el minuto 4 de la prórroga. Bastante. Quizás demasiado para la intensidad de la eliminatoria en el Narcís Sala, tras quedarse con uno menos en el minuto 36 de la primera parte. El capitán Cristian ha tenido que derribar a Ferrán cuando encaraba en solitario la portería y los rojillos han tenido que remar todo el encuentro a contracorriente. Sólo las fantásticas intervenciones de Gonzalo han evitado males mayores.
El gol de Kuku (1-0) en la prórroga sirve al Sant Andreu para acariciar su partido con un grande en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey. Alegría catalana y tristeza riojana. Poco más de media hora después de que la UD Logroñés cayera en El Sardinero, el Calahorra ha caído en la Ciudad Condal arrodillado tras luchar contra viento y marea. La cita con la historia tendrá que esperar.
