CARTA AL DIRECTOR

‘Una lacra que no cesa’

Te alejas de la cotidianidad. Procuras no estar pendiente de las noticias. Descansas, lees, reflexionas y comes más de lo recomendable. En un descuido poco aconsejable coges el móvil y, en un intento de dar una vuelta por el devenir de tu tierra, te encuentras con el terrorismo diario de la violencia de género.

Una mujer es herida con arma de fuego en Cenicero. Sobra que en la noticia se señale que el marido es de etnia gitana. Esta lacra criminal y sexista es un mal que no entiende de clases. Ni una muerte, ni un asesinato dejan de serlo según el origen del asesino.

Esta vez el fuego ha errado. Tal vez el arma homicida ha tenido más sensibilidad que el que la ha empuñado.

NO es enajenación ni un acto involuntario. Es una educación basada en la más absoluta humillación y posesión de la mujer como un objeto más cuyo titular es el marido o compañero.

NO puedo evitar dos gruesos lagrimones que desaparecen ayudados por las gafas antes de que nadie a mi alrededor se percate de mi desasosiego.

Puedo sentir el inmenso dolor de tantas mujeres. Esas cicatrices que nos dejan una marca imborrable.

Voy a intentar vomitar el asco que me producen estos sujetos.

*Puedes enviar tu ‘Carta al director’ a través del correo electrónico o al WhatsApp 602262881.

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