El Sereno

Curso de iniciación a la Biología básica en Logroño

La ciudad no solo es asfalto y tecnología. La urbe reserva huecos para la vida y debe haber quien piense que las aceras hay que abonarlas. De ahí que algunos vecinos tiren de sentido del humor para combatir la desvergüenza de quien se desprende de la materia orgánica que van esparciendo sus seres queridos.

No es la primera vez que El Sereno planta cara a las heces caninas y a la ausencia de civismo de sus propietarios. Pero la crítica social avanza a cada día que pasa y alguien ha optado por convertir la calle en un museo de ciencias naturales. La imagen que acompaña a estas líneas ha sido tomada en la calle Pío XII de Logroño y las etiquetas revelan que el perrete no ha sido el único en aliviar sus más bajos instintos en plena calle.

El Ayuntamiento de la capital riojana lleva un tiempo barruntando identificar a los canes por el ADN de sus depósitos legales. No estaría de más que abriera el abanico para señalar también a sus dueños. Porque el perro no puede evitar su naturaleza canina, pero el dueño sí está en disposición de renunciar a ser un cerdo.

*Puedes enviar cualquier ‘denuncia’ o curiosidad para la sección ‘El Sereno de NueveCuatroUno’ a través del correo electrónico o al WhatsApp 600830812.

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