Te han invitado a una cena y te toca llevar el vino. Entras en una tienda y echas un vistazo a las estanterías, al techo, a la luz, al dependiente, al suelo… hay una marca que te suena más familiar, un diseño que te llama más la atención y hasta un nombre que te parece más original. Eliges una botella y la sostienes en la mano. ¿Qué haces entonces? Darle la vuelta y leer la etiqueta.
Ahí están todos los secretos de lo que tienes frente a ti. Todo lo que encierra el cristal, convertido en líquido elemento, escrito en unas breves palabras y reflejado con imágenes para contar la historia del producto, sus características, sus valores, sus atributos, su composición y su garantía de calidad y de origen. El DNI de la alimentación. Y como decía un anuncio sobre el algodón, este no engaña.
Es por eso que desde la Denominación de Origen Protegida (DOP) Aceite de La Rioja se han propuesto concienciar a los consumidores para que también comprueben el sello que lleva su “oro líquido” cuando vayan a comprarlo. “Elige lo bueno, exige lo sano” como lema e imagen de una campaña que busca transmitir la calidad de sus productos. Para evitarnos sustos a la hora de llevar los alimentos a la mesa, el Consejo Regulador se ocupa de velar porque esa etiqueta sea un aval con más garantías que un cheque al portador.
Para ‘concienciar’ a los consumidores, una cita como si de dos enamorados que se están conociendo lentamente se tratara. En concreto, la cuarta por cuarto año consecutivo. Una jornada con el Aceite de La Rioja como elemento central que se celebrará el 11 de mayo en Logroño: degustación de tostadas, catas, show cooking y un taller de cocina.
Y como más vale enseñar a pescar que dar el pescado, este jueves (12 de abril) se desarrollará el cuarto taller de la Escuela de Cocina, en colaboración con el Centro Cultural Ibercaja. María José Fernández ha preparado un menú de lujo basado en pescado fresco con la magia que aporta a todos los platos el Aceite de La Rioja: tomates rellenos de ventresca de bonito y anchoas de Santoña; ensalada de boquerones con patatas; salmón tropical.
En la IV Jornada del Aceite, las estrellas invitadas al taller de cocina serán el pescado y las verduras, dos de los productos que sin duda mejor casan en los fogones: crema de espárragos con virutas de ibéricos; ensalada de langostinos con aguacate y aliño de fresa; estofado de sepia con alcachofas de la tierra.
Como no sólo de aprender a cocinar vive el hombre (ni el aceite), el Aceite de La Rioja también estará presente en las próximas semanas en las marquesinas del transporte urbano en la capital riojana y en los medios de comunicación. Asimismo, el Consejo Regulador pondrá en marcha un concurso fotográfico a través de las redes sociales (Facebook, Twitter e Instagram).
Otra de las iniciativas puestas en marcha es la mejora de la visibilidad de ese oro líquido riojano en el punto de venta. Una de las joyas de la gastronomía en nuestra región tiene que darte al ojo nada más entrar por la puerta de la tienda. Ya lo sabes: “Elige lo bueno, exige lo sano”. No fallarás.
*Artículo realizado en colaboración con Aceite de La Rioja.
