Que sepamos, no ha habido ningún conflicto a la hora de tomarse una foto, pero en La Rioja se habla estos días tanto de la familia real belga como de la nuestra propia. Felipe y Matilde recorren estos días el tramo del Camino de Santiago que recorre nuestra región. No lo hacen con demasiada pompa (unas Chiruca, mochila, los típicos bastones y un gorrito para protegerse de la solana), pero resultaría frívolo señalar que son unos peregrinos más.
Sus majestades pusieron pie a tierra este martes en el aeropuerto internacional de Agoncillo. Lo hicieron por separado (por motivos de seguridad), pero no solos. Junto a ellos, sus cuatro hijos (los príncipes Gabriel, Elisabeth, Emmanuel y Eleonor), un grupo de amigos y el equipo de guardaespaldas también han tenido que pegarse la caminata. Súmenle a eso el apoyo sobre el terreno de Policía Nacional y Ertzaina y el sarao ya es completo.
Sin embargo, aunque sus reales pasos recorren terreno riojano, sus espaldas reposan en territorio vasco. Porque a pesar de repartir sus etapas en diferentes días, el ‘cuartel general’ no es otro que el Hotel Viura de Villabuena de Álava. Allí duermen con vistas a la sierra de Cantabria y degustan algún que otro vinito de la zona (que hayan trascendido, Luis Cañas, Valserrano e Izadi).
El pasado año, los reyes de Bélgica ya visitaron el Camino de Santiago, aunque en aquella ocasión sus esfuerzos se concentraron en completar algunas de las etapas que transcurren por Navarra. Si bien no se ha detallado hasta cuándo estarán Felipe, Matilde y su séquito por La Rioja, la agenda compartida por la casa real no tiene programado ningún acto ni esta semana ni la siguiente.
