La alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, ha elogiado a las personas distinguidas con las Insignias de San Bernabé 2017 -las hermanas Dulín, Félix Revuelta, Javier Gracia y Paco Marín- en el acto celebrado en el Ayuntamiento de la capital riojana, que “se han erigido en un ejemplo de tesón y tenacidad para toda una ciudad”.
LOGRONO. La alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, en el acto de entrega de las insignias de San Bernabé 2017 a las hermanas Dulín, Félix Revuelta, Javier Gracia y Paco Marín. También se entrega una placa conmemorativa el Grupo de Danzas de Logroño por su 75º aniversario. 10 junio 2017. Justo Rodriguez
El discurso de la alcaldesa
Los hechos que acontecieron en 1521, la victoria del pueblo de Logroño contra las tropas francesas tras un duro asedio y una cruenta batalla, son -sin duda- el germen del Logroño de hoy, de la ciudad moderna. Ahí encontramos el origen de lo que somos y de lo que sentimos, del “ser logroñés”.
Somos un pueblo valeroso y solidario, que hizo de la unión de voluntades su principal arma de fuerza contra el ejército invasor. Que juntó espadas y ballestas, escudos y lanzas, pensamientos y alientos por no ser conquistados, por ser libres y así decidir su futuro.
Los logroñeses de hoy tenemos también aspiraciones e importantes proyectos que afrontaremos como nos enseñaron hace 500 años: como un sueño colectivo que solo podremos alcanzar si nos mantenemos todos juntos. Si somos capaces de forjar acuerdo de amplia mayoría, como estamos haciendo, para no perder las grandes oportunidades del momento.
Y este acto que hoy nos congrega en el salón de plenos es un reconocimiento público al valor, a “ser logroñés”.
El mismo valor que muestran cada día los trabajadores y emprendedores de esta ciudad: que arriesgan, que se esfuerzan, que producen, que quieren conseguir un Logroño mejor.
Porque la ciudad de Logroño no son sólo sus calles, sus monumentos históricos, sus edificios. La ciudad de Logroño son sus ciudadanos. Somos los logroñeses.
La Insignia de San Bernabé que entregamos hoy representa, por tanto, el reconocimiento de la ciudad a los valores que la cimientan y que se encarnan en la vida de todos y cada uno de nosotros.
La entrega anual de esta Insignia nos hace sentirnos muy orgullosos de una ciudad que ha sabido construirse sobre tan larga tradición de valor, lealtad y fortaleza. Este orgullo de ser logroñés no lo exhibimos ni hacemos alarde. Somos discretos y sencillos, trabajadores y emprendedores.
Es un orgullo que todos llevamos muy metido en el corazón y que manifestamos con cuenta gotas, pero que nos ayuda a afrontar los retos y las dificultades con tesón.
Hoy, precisamente, es uno de esos días en los que nos sentimos humildemente orgullosos de ser logroñeses, y lo exteriorizamos sin complejo, porque actualizamos esta tradición de la Insignia de San Bernabé.
Hoy, precisamente, me gustaría como Alcaldesa de Logroño, apelar a ese orgullo para que sigamos trabajando juntos por superar nuevos desafíos. Mano con mano, codo con codo, corazón con corazón. Porque Logroño está muy vivo.
Sé que ya lo estamos haciendo. Gracias al esfuerzo de tantos logroñeses y logroñesas anónimas, hoy Logroño es una de la ciudades de España donde más empleo se crea; donde los jóvenes, las mujeres, las personas con diferentes capacidades tienen más oportunidades de disfrutar de una vida plena. Es el trabajo de todos el que hace de Logroño una ciudad que presume de ser paradigma de bienestar, de calidad de vida.
Es a todos esos ciudadanos anónimos a quienes premiamos hoy en la persona de tan dignos representantes de nuestros convecinos. Vecinos nuestros que se han erigido en ejemplo de tesón y tenacidad para toda una ciudad y que nos imparten una enseñanza magistral: Que el esfuerzo, la constancia y el trabajo siempre tienen recompensa.
Las hermanas Dulín Domaica, Isabel y María Ángeles. Hoy reconocemos la tradición familiar, la perseverancia, el logroñesismo y el trabajo a través de María Isabel y María Ángeles, bisnietas de Pablo Dulín, que hace 120 años abriera su propio negocio de sombreros: Dulín Sombrerero. Cinco generaciones han hecho grande este comercio que ha visto pasar tres siglos en Logroño. Son parte del recuerdo de logroñeses de todas las edades, que han lucido algunos de sus modelos de sombreros o boinas o simplemente han apreciado sus escaparates y el atractivo de un establecimiento tradicional y centenario. Se ha convertido en un símbolo de Logroño y en un reflejo del apreciado comercio logroñés, de calidad, especializado y también en continua evolución, ahora que se cumplen 20 años de la consideración de Logroño como Ciudad Comercial. Isabel y María Ángeles han hecho gala de su profesionalidad durante años pero ante todo de su amabilidad, siempre dispuestas a ayudar, con un trato familiar. Han encarnado el gusto por lo bien hecho, por lo artesano y por un comercio de ciudad cercano que ha dejado huella en todos nosotros. La calle Portales siempre guardará en su memoria a Dulín Sombrerero, parte de la historia de nuestra ciudad, una historia que la han escrito con letras mayúsculas y de la que nos sentimos muy orgullosos.
Félix Revuelta. En esta mañana reconocemos al empresario riojano Félix Revuelta. Un gran ejemplo de emprendedor y gestor, pero ante todo de una persona comprometida con su tierra. Como bien le gusta definirse, es un hombre hecho a sí mismo que a pesar de la distancia nunca ha olvidado sus raíces. Siempre recuerda su Logroño, su gente, sus amigos de la infancia con quienes sigue manteniendo el contacto y sus vivencias… Así es Félix Revuelta, un chico que desde nuestra ciudad con 16 años hizo la maleta para emprender nuevos horizontes. Es fundador y presidente de Naturhouse, empresa de dietética que suma 2.046 centros en una treintena de países, y de Grupo Kiluva, conjunto de 36 empresas de sectores como la cosmética, motor, energías renovables… Su última línea de negocio, los centros de salud-hoteles Healthouse. Su extenso currículum está a altura de su persona. Gran hombre de negocios pero también ciudadano comprometido y apasionado por todo lo que hace, apasionado por su tierra. Durante años ha realizado, y lo sigue haciendo, una gran labor de promoción de nuestra ciudad a través del deporte, con el apoyo a clubes como la Unión Deportiva Logroñés; Voleibol Logroño y Naturhouse La Rioja. Pero su aportación ha ido más allá del deporte, mostrando su apoyo a entidades benéficas como Cocina Económica y Proyecto Hombre. Pero ante todo es un apasionado de su familia, de su mujer Luisa y de sus hijos, Kilian y Vanesa… sin olvidar uno de sus cargos más importantes y del que seguro se siente más orgullo: el de ser abuelo.
Javier Gracia Lería. Javier Gracia es otro digno merecedor de la Insignia de San Bernabé porque encarna algunas de las principales señas de identidad de nuestra ciudad. Artífice de la tarea de poner en valor durante las últimas décadas el Camino de Santiago a su paso por Logroño y por toda La Rioja; embajador de nuestra gastronomía e imagen de una institución íntimamente ligada a nuestra cultura como es la Cofradía del Vino de Rioja. A lo largo de los diez años que ha permanecido al frente, como Gran Maestre de la Cofradía, y de treinta como miembro de la institución, uno de sus grandes empeños ha sido vincular a los más jóvenes -a las generaciones emergentes- con el gran tesoro que brota de nuestra tierra. Pero, además, Javier Gracia es una persona muy comprometida con su entorno; que ha trabajado mucho para construir el Logroño del que hoy disfrutamos, participando activamente en organismos como el Consejo Social de la Ciudad, entidades como Cultural Rioja, la UNED o el IRJ y demostrando su carácter solidario desde su colaboración con la Cocina Económica.
Paco Marín. Finalmente, Paco Marín representa al logroñés implicado socialmente, a una persona que, tanto en su trayectoria laboral como vital, siempre ha reivindicado la dignidad y los derechos de las trabajadoras y de los trabajadores, la equidad social para construir un Logroño más justo y solidario. Y para ello se ha valido también de la música, desde su faceta de cantautor. Vinculado a la canción protesta, ha sido definido en ocasiones como “un cantor pletórico de coraje, dignidad y emoción sincera” Paco Marín se declara un amante de Logroño, de la ciudad y de su naturaleza, de este valle que nos rodea. Seguro que este apego a la naturaleza logroñesa le ha servido como motivo de inspiración y como refuerzo de su personalidad. Por último, el Ayuntamiento de Logroño concede una placa conmemorativa al Grupo de Danzas de Logroño por su implicación con la ciudad y porque hace 75 años una mujer decidida, que amaba a su tierra y sus tradiciones, tuvo el buen acierto y el empuje para fundarlo. Este Ayuntamiento, la primera vez que concedió estas Insignias, consideró que Nieves Sainz de Aja merecía este reconocimiento tan sentido. Hoy ese cariño con que siempre recordamos su figura lo depositamos en su grupo y en su actual director, José Angel Bartolomé, que sigue danzado y haciendo danzar a 120 riojanos que lo son desde el alma. Son hombres y mujeres cuyo amor por La Rioja les ha llevado a través del baile y la música a profundizar en la historia para diseñar trajes y danzas siendo fieles a los orígenes.
Como Corporación es un deber reconocer vuestro trabajo y vuestros éxitos, y el de todos y cada uno de los logroñeses; muestra de que el corazón de Logroño es el reflejo de un pálpito vivo y constante. A nivel personal, es una gran satisfacción contar con vecinos y vecinas de Logroño que han sabido transformar sus sueños en una realidad latente de vida. Hoy, sois vosotros los protagonistas del reconocimiento de toda la ciudad. Pero ese pálpito al que hacía referencia es también una evidencia de que hay muchos más logroñeses trabajando intensamente por dar forma a sus deseos. Y ese trabajo callado e incondicional les hará merecedores del reconocimiento de la ciudad que un día les vio nacer. Termino ya. Reitero mi felicitación. Hoy es un gran día para vosotros. Continuad en vuestro empeño para que llenéis con entrega y dedicación cada uno de los rincones de esta nuestra Gran Ciudad que es Logroño. Y a los miles de logroñeses y logroñesas, a los ciudadanos que habitan esta ciudad, deciros que teniendo motivos para la esperanza la recompensa se encuentra en el esfuerzo, y vuestras vidas son muestra de ello y un esfuerzo total es una victoria completa. Celebremos estos días la festividad en honor a nuestro Patrón San Bernabé y celebremos el orgullo compartido de ser logroñés.
