El CD Calahorra tiene dos bolas de partido para obtener el ascenso a Segunda División B. No, no hablamos de las dos eliminatorias del playoff que debe superar con éxito para lograr la promoción, sino al propio playoff en sí y a la vía administrativa.
La consumación del descenso del Mallorca a la categoría de bronce acarrea que su filial, enclavado en el Grupo III de Segunda B, pierda esta categoría pese a haber finalizado la temporada fuera de la zona de peligro. Ahora la Federación debe decidir cuál es el equipo que ocupa el vacío dejado por el filial bermellón y ahí es donde entra en juego el Calahorra.
No es ningún secreto que el reglamento federativo es un laberinto plagado de interrogantes. Tan solo señala que en un caso como este el ascenso administrativo corresponderá al equipo que haya obtenido una mayor puntuación durante la temporada anterior en la Tercera División. Sin embargo, la norma deja abierta a la interpretación si esa puntuación debe haberse cosechado en el conjunto nacional de la categoría o exclusivamente en el ámbito territorial del equipo descendido.
Artículo 197 del Reglamento General de Real Federación Española de Fútbol.
En el segundo de estos supuestos, el ‘Gordo’ le correspondería a la UD Poblense, segundo clasificado del grupo balear con 79 puntos (el Formentera ascendía hace dos semanas al eliminar al Alavés B en la eliminatoria de campeones del playoff). Sin embargo, si la Federación se acogiese a la segunda vía, nadie ha logrado más puntos (95) que el Calahorra a lo largo de la temporada, por lo que los riojanos serían equipo de Segunda B por pleno derecho.
“Es el ‘Plan B’, pero evidentemente recurriremos a él”
El entrenador del equipo riojano, Eduardo Arévalo, insiste en que “nosotros queremos ganarnos el ascenso en el campo, pero de no darse el caso es evidente que el club reclamaría esa plaza porque somos el equipo con más puntos de la Tercera nacional”.
Arévalo asegura que esta situación “no nos descentra, estamos absolutamente concentrados en obtener el ascenso desde el césped” y matiza que “necesitamos seguir haciendo un buen playoff porque la Federación computa para el ascenso administrativo la puntuación durante la liga regular y durante la fase de ascenso”. Así, señala que “el Náxara está ahora mismo a un punto de nosotros y el Atlético Malagueño a tres, por lo que nos haría falta un punto más para recurrir a esta vía con garantías”.
Respecto a los laberintos del reglamento, el entrenador del Calahorra recuerda que “ha habido resoluciones para todos los gustos en los últimos años; últimamente se le ha dado a equipos de la comunidad del equipo descendido, pero es un asunto que no está claro”.
