Todo empezó hace tres años en San Sebastián, aunque con ADN netamente riojano. Al igual que se inician muchos grandes proyectos, la cosa echó andar casi por casualidad. “Hicimos unas sudaderas para un grupo de amigos, tuvieron muy buena aceptación y a partir de ahí decidimos dar un paso más y jugárnosla”.
Lo dice Guillermo Botella, el 50% de Old Habits Co, una firma de ropa ‘hand made’ que ya ha enviado prendas a rincones tan remotos del planeta como Canadá, Estados Unidos, Australia o Brasil. Y eso que estos clientes foráneos no optaban a una de las fortalezas de la compañía riojana: “Nuestros tótems son el ‘handmade’, una buena atención al cliente y entregas gratuitas en bicicleta en Logroño y San Sebastián”, señala, asegurando que “más que una marca pretendemos ser una filosofía.
La principal fuente de inspiración de la ropa de Old Habits Co es la cultura del piñón fijo, una modalidad de ciclismo urbano que afloró a través de los repartidores de San Francisco. Estos se dieron cuenta que al prescindir del cambio de marchas su bicicleta ganaba en agilidad y, al igual que sucedió con otros fenómenos urbanos como el ‘skate’, los adeptos al piñón fijo empezaron a compartir gustos estéticos.
La compañía la conforman un ingeniero y un arquitecto en plena formación de diseño en la Esdir. Sin embargo, sus planes de futuro no pasan por estirar la vida de este proyecto. “Habría que finiquitar esta etapa para abrir otra todavía más fuerte; me gustaría crear un espacio en Logroño que aglutinase moda, café y bicicletas”, sostiene Botella, que se lanza a sus proyectos como el leitmotiv de Old Habits Co, a piñón fijo.
