Ibercaja cuenta en la actualidad en La Rioja con 141.000 clientes, lo que supone el 44% de la población de la región, y gestiona alrededor de 4.400 millones de euros -3.300 corresponden a productos de ahorro y 1.100 a créditos-. El director del Área Financiera, Antonio Martínez, y el director territorial de Ibercaja en La Rioja, José Luis Ollero, han presentado este miércoles el impacto de la actividad de esta entidad en la comunidad, donde aspiran a “seguir siendo un referente”.
Entre esta cliente, Ibercaja cuenta con 800 comercios como clientes, 2.700 empresas que trabajan con la entidad y una “elevada cuota de negocio en el sector agroalimentario”, ya que trabajan con 6.000 agricultores, 600 personas jurídicas y 100 asociaciones y cooperativas agrícolas.
Tras ochenta años ofreciendo sus servicios en la región, el director territorial ha destacado la fuerte vinculación que tiene Ibercaja con esta tierra, donde son la entidad con “mayor número de oficinas y empleados”, hasta el punto de contar con 109 centros para dar servicio a 92 localidades y tener en nómina a 232 empleados.
Ollero y Martínez han destacado que son el banco que menos oficinas ha cerrado en La Rioja con la crisis, ya que únicamente han sido dos. “Un aspecto destacable, sobretodo teniendo en cuenta que la comunidad ha visto caer en un 32% el número de oficinas bancarias, que era de 339”, han añadido, indicando que solo ha cambiado su modelo de pequeñas entidades a otras más grandes con personal especializado.
De cara al futuro, han matizado, ambos dirigentes creen que habrá que “reconvertir” la Red en los pueblos donde se ha perdido hasta la mitad de la población, además de seguir con la adaptación a las nuevas tecnologías, ya que “casi 71.000 de los clientes riojanos operan ya a través del móvil”.
SITUACIÓN DE LA ECONOMÍA
La Rioja representa el 5% del volumen total de actividad de Ibercaja a nivel nacional y cuenta con 19.000 clientes de banca personal y unos 400 de banca privada (con operaciones a partir de 300.000 euros). En cuanto al crédito que concede a clientes, el 57% se dedica a financiación de viviendas, 25% a empresas y el resto a actividades productivas.
Esta entidad tiene apenas ochenta viviendas en stock en La Rioja y el ratio de mora en financiación es “muy bajo”, ha indicado Ollero, de apenas el 2,60 %, para asegurar que la entidad está “en disposición” de volver a financiar las operaciones de compraventa y desarrollos inmobiliarios. El sector inmobiliario no estaba sobredimensionado en la región y el “stock” de vivienda que tenía se acabará vendiendo, porque era “de calidad”.
Sobre la situación económica regional, ha indicado que la crisis llegó más tarde que al resto de comunidades, “por lo que ahora cuesta más acelerar”, porque el impacto económico fue “muy fuerte en todos los sectores”. Así, se ha mostrado “optimista” en el crecimiento de la región, con previsiones de crecimiento de las exportaciones, y empresas muy innovadoras en el sector de la agroalimentación.
