Al rock siempre se vuelve; delante del ordenador, como quien esto firma, o detrás de bombos y platillos, como Tacho González, batería de 091 y protagonista de las siguientes líneas. Así, a bombo y platillo, anunciaba la banda granadina su regreso a los escenarios veinte años después de su último concierto. Será en Logroño. Será en Actual’16.
941: – ¿Qué razones os han llevado a reunir de nuevo el grupo?
091: – La principal es que nos apetecía. Pero se han dado un cúmulo de circunstancias que nos han animado a hacerlo, a pesar de que siempre dijimos que eso nunca ocurriría: Mucha gente ha ido insistiendo con verdadera devoción, el año pasado incluso organizaron una recogida de firmas en internet, y además coincidía con el veinte aniversario de nuestra despedida.
941: – Siempre fuisteis un grupo alejado del tono festivo que imperaba en la mayoría de las bandas de los años ochenta, gozabais de muy buena prensa pero no del éxito masivo…
091: – Se puede decir que éramos un grupo un poco “reconcentrado”. Nuestras letras siempre hablaban de perdedores, de amargura, de soledad, de temas que no eran muy festivos ni comerciales. En ese sentido sí fuimos diferentes a la gran mayoría. Hemos sido lo que se llama un grupo de culto, un grupo maldito… Tiene sentido por lo que comentaba, porque nuestras letras no eran para radiofórmulas, sino para escuchar en casa… Siempre hemos primado la cuestión artística sobre la comercial: No éramos un grupo de masas. Queríamos vivir de esto, y hacíamos la máxima promoción de nuestro trabajo para llegar al mayor número de gente posible, pero la fama o las ventas nunca fueron nuestra meta; de hecho, la fama es algo bastante engorroso por lo que he podido intuir.
941: – Quizá esa seriedad y profundidad en las letras [tanto Tacho como José Ignacio Lapido, guitarra, viven hoy de escribir guiones] han permitido que las canciones hayan sobrevivido bien al paso del tiempo.
091: – Las letras de José Ignacio siempre han sido proféticas, y muchas de aquellas canciones escritas hace más de veinte años tienen plena vigencia. Pienso en “Este es nuestro tiempo”, “Sigue estando Dios de nuestro lado” o “Qué fue del siglo XX”, temas que están tratados de una forma imperecedera.
941: – Pero muchas cosas han cambiado en estas dos décadas. Singularmente, en la industria musical.
091: – Comentábamos con nuestro mánager que “Nos despedimos con un fax y hemos vuelto con un tuit”. Eso lo dice todo. El anuncio de que lo dejábamos fue mediante el fax y la noticia de nuestro regreso se ha difundido a través de las redes sociales. El mundo digital ha cambiado el mundo de la música una barbaridad: los vinilos ya sólo se fabrican para coleccionistas, nadie compra un CD, la música se ha abaratado, y esto ha conllevado una campaña injusta contra la propiedad intelectual; en algún momento hay que empezar a desandar ese camino y retomar el respeto por el trabajo de los autores.
941: – Incluso las grandes discográficas son ya casi cosa del pasado y los artistas se lo tienen que currar desde abajo.
091: – Nosotros siempre hemos sido así. Con las discográficas siempre fue una lucha continua; cuando más a gusto hemos estado es cuando editábamos nosotros mismos nuestros discos.
941: – ¿Tenéis planes para volver al estudio de grabación?
091: – La gira la hemos planteado como una celebración, un regalo para nosotros y la gente que nos ha seguido en estos veinte años (muchos eran muy jóvenes o no habían nacido cuando dejamos el grupo y no tuvieron ocasión de vernos) y para la gente que se quiera sumar. Pero para hacer nuevos discos haría falta que el grupo tuviera una inercia de varios años, y no tenemos esa idea; nos parecería algo extraño y artificioso el planteárnoslo. Dentro de un año cada uno seguirá con su vida. Aunque nunca se puede decir nunca jamás…
941: – ¿Qué vamos a ver y oír en vuestro concierto?
091: – Estamos preparando un repertorio de entre hora y cuarto y hora y media con muchos de los clásicos de 091 que tocamos en el último concierto y alguna canción que no hemos hecho nunca en directo o que hemos interpretado muy rara vez.
941: – Ya conocéis Logroño…
091: – Estuvimos en otro Actual junto a La Frontera. Me parece que entonces tocamos en un frontón, y sonaba regular…
[aesop_content color=”#0000ff” background=”#ffffff” width=”70%” columns=”1″ position=”none” img=”http://www.bpej.udg.mx/sites/default/files/acetato%20en%20%20tornamesa.jpg” imgrepeat=”no-repeat” floaterposition=”left” floaterdirection=”up”]DISCOGRAFÍA: Cementerio de automóviles (1984). Más de cien lobos (1986). Debajo de las piedras (1988). 12 canciones sin piedad (1989). El baile de la desesperación (1991). Tormentas imaginarias (1993). Todo lo que vendrá después (1995). Último concierto (1996).
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