Asturias es una tierra de contrastes. Playa y montaña. Negras minas y verdes manzanas con las que hacer sidra. Víctor Manuel y Melendi. El líder y el colista del Grupo I de Segunda B. Más de trescientos kilómetros la separan de La Rioja, pero la categoría de bronce ha unido el futuro futbolístico de estas dos regiones durante las últimas dos temporadas. El playoff de la UD Logroñés pasa por esa comunidad que su Consejería de Turismo se ha encargado de dar a conocer como el paraíso natural -cualquiera que haya pasado por allí sabe que no mienten-. Marino de Luanco, Lealtad y Langreo. Esos son los tres rivales que el conjunto riojano tiene como obstáculo para llegar a la fase de ascenso y ya sólo le quedan dos. El primero lo ha ventilado en el Día del Trabajador gracias a un gol de Iker Alegre al filo del descanso.
Jugaba el goleador de la tarde cerca de su Gijón natal y allí ha vuelto a despertar esa bestia que al comienzo de la temporada hacía temblar todas las defensas rivales. Asturias es una tierra de contrastes, decíamos, pero también una tierra de delanteros. Contaba Mondo Moyano que cuando le preguntan por los arietes asturianos responde que son colosos, hombres hechos a sí mismos y sin miedo a la muerte. Iker Alegre es así, pero también irregular. Tras un arranque espectacular, insustituible en el ataque de Carlos Pouso, se ha ido diluyendo hasta quedar en más ocasiones de las esperadas en el banquillo. Todo eso ha quedado atrás en Luanco y el tanto del asturiano ha dado tres puntos a la UD Logroñés, que tendrá que esperar hasta que acabe el fin de semana para saber si su felicidad es completa.
La maratón está a punto de terminar. Kilómetro 36 de 38, como le gusta comentar al técnico blanquirrojo. Pese a las dudas generadas en algunas fases del campeonato y no cerrar el playoff por la vía rápida ante los filiales de Celta y Valladolid en Las Gaunas, por poner un ejemplo, el conjunto riojano comienza a marcar dos nuevas fechas en rojo en el calendario. La fase de ascenso está a la vuelta de la esquina y los aficionados no quieren pedirle cita a su cardiólogo. Este lunes no les hará falta. El Marino de Luanco, descendido ya a Tercera División, ha sido un mero trámite. La presión la tienen otros. La UD Logroñés se marcha de puente con los deberes hechos.
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