El sol ha vuelta a brillar en el cielo riojano este martes. Después de casi tres semanas en las que la lluvia no ha cesado de caer en toda la región, Lorenzo ha asomado entre las nubes para llenar La Rioja de luz. Y color, claro, porque el viñedo sigue mostrando su lustrosa paleta de colores característica del otoño.
Y en las cotas más altas, lo que ahora se puede ver a kilómetros de distancia es el pequeño manto blanco que este fin de semana se posó sobre las cimas de los montes riojanos. Por ejemplo, en Moncalvillo, como muestran las cámaras del SOS Rioja.
El otoño ha mostrado durante estos días su cara más parecida al invierno. Sobre todo, en Valdezcaray, donde el San Lorenzo permanece cubierto de blanco a la espera de comenzar la temporada de esquí. Si se cumplen las previsiones más optimistas, el próximo 30 de noviembre ya se podrá abrir al público.