La sede del Consejo Regulador de Rioja ha albergado este viernes una reunión en la que han estado presentes el presidente del Consejo Regulador, Fernando Ezquerro; el director general del Consejo Regulador, José Luis Lapuente; y los consejeros de agricultura del Gobierno de La Rioja, Noemí Manzanos; del Gobierno del País Vasco, Amaia Barredo, y del Gobierno de Navarra, José Mari Aierdi, y en la que se han tratado temas importantes para el sector vitivinícola.
La reunión, solicitada a petición de las comunidades después de la que mantuvieron el pasado viernes y en la que los Gobiernos regionales se comprometieron a apostar por colaborar en aspectos relacionados con el sector del vino, como la reforma del reparto de los fondos europeos o la reducción de las cargas burocráticas a las bodegas en la promoción en terceros países, ha ido en dos direcciones. Por una parte, “hemos compartido la preocupación por la situación actual” y por otra “nos hemos comprometido a echar esas luces largas que nos permitan llegar a los próximos años en una situación mucho más fortalecida”, ha explicado a la salida el presidente del Consejo, Fernando Ezquerro.
“Entre todos entendemos que tiene que haber modificaciones estratégicas. Esto empieza a ser una situación que no sabemos si salta de lo coyuntural y por eso hemos pedido su apoyo y su compromiso para seguir trabajando juntos”.
Una reunión en la que se ha marcado una hoja de ruta “que nos ayude a salir de este momento de crisis”, ha añadido Ezquerro, que ha recibido el respaldo de las tres administraciones. “Nos han reconocido que, a pesar de las ayudas de los dos últimos años, el del vino ha sido un sector que en los últimos tiempos ha andado solo”. Además, ha adelantado que seguirán las ayudas “con el compromiso de buscar sinergias entre administraciones y sector privado, algo que nos ayude a salir más fuertes de esta situación en un sector que es vital para las tres regiones”.
Ha lamentado el que “parece que cuando se ayuda al sector del vino sale a la luz pública y todo el mundo lo comenta, pero no ocurre cuando se apoya a otros sectores a los que se ha ayudado durante muchos años”.
Vendimia en Rioja Oriental. | Foto: Leire Díez
Además, ha puntualizado, esas ayudas -unos 70 millones de euros en dos años al sector- llegan, en parte, de una partida de la Unión Europea que existe para el sector “y que están a disposición cada año para diferentes cuestiones, entre ellas las que se han apoyado ahora”.
“Nosotros atravesamos un momento puntual en el que necesitamos esas ayudas, agradecemos el apoyo y vamos a ver dónde acaba”, ha considerado Ezquerro, que también preside la Interprofesional del Vino de España.
Trabajar “con luces largas”
Para superar el momento actual, “en el que no podemos ocultar que el consumo de vino ha caído, sobre todo de tintos” cree que “hay que trazar una hoja de ruta, trabajar en ello y hacer una puesta en común, pero con las luces largas, porque a veces el día a día nos abrasa”.
Entre otras, es partidario de “buscar nuevos productos” como ya hizo Rioja en 2017 al crear los “vinos de pago”, que se unen a los jóvenes, crianzas y reservas “y también hemos empezado con los espumosos de calidad”.
En definitiva, ha detallado, pretende “encontrar nuevos nichos” para el Rioja y también nuevos mercados “pero en eso sí debe haber ayuda de la administración” para “encontrar nuevas fórmulas con las que acceder a esos nuevos mercados”.
“Nosotros tenemos que a competir con otros modelos (vinícolas) en los que no tienen tantos remilgos en promocionar un producto como el nuestro, que no es nocivo para la salud” y por eso “nos tienen que ayudar a poner el Rioja en los mejores sitios, llegar a donde otros llegan” y que “no parezca que vendemos un producto con contraindicaciones, cuando no es así”, ha recalcado Ezquerro.
El presidente del Consejo del Rioja ha asegurado que en su reunión con los consejeros “no ha salido la palabra arranque”, de viña, porque la institución ya tiene una comisión de estudio para analizar una posible reestructuración de la masa vegetal “y sí que nos hemos comprometido a que los gobiernos también estén ahí”.
Según la consejera vasca, Amaia Barredo, en una nota remitida por el Gobierno vasco “el objeto principal de la reunión se ha centrado en poner en común todos aquellos aspectos clave para, de forma conjunta, desarrollar una hoja de ruta que permita afrontar los retos futuros, colaborando en las diferentes comisiones técnicas de estudio abiertas en el seno del Consejo y ofreciendo los recursos técnicos necesarios para la colaboración. Somos conscientes de la necesidad de fortalecer el sector vitivinícola en las tres comunidades a través de la Denominación, siempre asociada a la tradición y a la más alta calidad”.
También se han comentado algunos aspectos técnicos de su postura conjunta, ya trasladada al Ministro de Agricultura, Luis Planas, para “modificar la forma de calcular a futuro el reparto entre comunidades autónomas de los fondos europeos consignados en el marco de la Intervención Sectorial Vitivinícola (ISV)”.
Asimismo, han comentado las medidas excepcionales que han adoptado en esta campaña sus respectivos gobiernos para corregir el desequilibrio en el sistema oferta-demanda para las uvas y vinos acogidos la DOCa Rioja, así como para incentivar y asegurar a los viticultores la venta de sus uvas a precios rentables, favoreciendo la estabilidad del sector.
También han hecho referencia a las medidas a activar de manera consensuada con el sector, en el marco en el que actúa el Consejo Regulador de la DOCa Rioja que comparten las tres comunidades y en el que tienen voz, pero no voto. Los tres responsables autonómicos se han ofrecido a colaborar en la comisión técnica de estudio abierta en el seno del Consejo, “conscientes del peso del sector vitivinícola en las tres comunidades y de la fortaleza de la marca Rioja, siempre asociada a la tradición y la más alta calidad”.
