Las reacciones al revés que ha propinado el Ministerio de Transportes al Ayuntamiento de Logroño no han dejado de sucederse. El Gobierno rechazaba las alegaciones presentadas por el Consistorio que encabeza Conrado Esconar para justificar la marcha atrás a tres proyectos de movilidad ideados por el anterior equipo municipal, por los que Logroño podría tener que devolver los fondos recibidos e incluso afrontar posibles penalizaciones.
La primera reacción fue la del propio Consistorio, que ha llevado su relato a una batalla ideológica con el ministro. El alcalde de Logroño, Conrado Escobar, afirmaba este miércoles que “Óscar Puente no nos tiene que decir cómo gobernar la ciudad”, al tiempo que se preguntaba “por qué el ministro quiere tan poco a los logroñeses. Logroño se gobierna desde Logroño, no desde un despacho del Ministerio”.
También salieron al paso la misma tarde del miércoles tanto el PR+ como Podemos. El primero, a través de Rubén Antoñanzas, pedía al alcalde rectificar sobre el carril bici de Avenida de Portugal y lamentaban que Escobar “expone a la ciudad a una posible sanción millonaria por eliminarlo sin contar con la autorización del Ministerio de Transportes, si bien todavía se encuentra a tiempo de solucionarlo”.
Por su parte, Podemos exigía la “inmediata” dimisión del alcalde de Logroño por “su absoluto fracaso” en la gestión. “El alcalde jugó con todos los logroñeses al basar toda su campaña electoral en la eliminación del carril bici y en contra de las calles abiertas” y “pese a saber que no podían eliminar ese carril bici, firmaron la resolución de Alcaldía sin autorización ni comunicación alguna con el Ministerio de Transportes”, aseguraba en un comunicado la edil Amaia Castro.
El PSOE esperaba a la jornada de este jueves para posicionarse sobre el problema. Su portavoz en el Ayuntamiento, Luis Alonso, señalaba que “como partido mayoritario, pedirá un pleno extraordinario para que Conrado dé la cara. Que diga cuánto nos va a costar su erre que erre, casi suicidio”. Alonso ha explicado que los tres proyectos contaban con financiación pública (el eje ciclista de este a oeste de la Avenida de Portugal, la obra de la calle Sagasta y el voladizo de la A-13) y subrayado que “no se puede seguir jugando a la ruleta rusa con dinero público. Ya vale de levantar cortinas de humo”.
También el Partido Popular, a través de su diputado nacional Javier Merino, pasaba la pelota al ministro Puente. El PP presentará esta semana una solicitud de comparecencia del titular de Transportes y Movilidad Sostenible para que explique en el Congreso y el Senado “por qué ha declarado la guerra a Logroño”.
Tampoco han faltado las reacciones sociales. Las asociaciones Ecologistas en Acción y Logroño en Bici han exigido este jueves la restitución del eje ciclista y han recordado que diversos colectivos pidieron en múltiples ocasiones que se mantuviera estas intervenciones porque contribuyen a una movilidad más sostenible y a mejorar la vida de las personas.
El Ministerio: «Se han saltado las condiciones»
El propio Ministerio ha sido el último en tomar la palabra sobre el asunto. El Ayuntamiento de Logroño es el que «se ha saltado las condiciones y las normas aprobadas» para la concesión de fondos europeos, con decisiones «unilaterales» sobre algunos proyectos «que van en contra de los intereses de los ciudadanos». Así lo han explicado a EFE fuentes de esta cartera del Ejecutivo.
En el mismo sentido se ha pronunciado la Delegada de Gobierno, Beatriz Arráiz, a NueveCuatroUno. «Aquí se han aplicado criterios técnicos por el cumplimiento de requisitos que todos sabíamos que son estrictos. Los fondos eran para lo que eran y estaba establecido en las bases». Así, ha asegurado que «nadie pone en duda la legitimidad del Ayuntamiento de Logroño de hacer lo que considere con los proyectos, pero tendrá que renunciar a las ayudas porque igual que Logroño está sometido al Ministerio, éste lo está a los criterios europeos»
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