Con La Rioja inmersa en una cuarta ola de calor, las temperaturas máxima rondarán los 40 grados, convirtiendo este fin de semana en un desafío a partir de las horas centrales de este sábado y domingo. Pero no todo está perdido: la región ofrece refugios naturales, islas climáticas, en donde el calor extremo se vuelve algo más llevadero.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha emitido un aviso amarillo, alertando sobre el riesgo que representa esta ola de calor, una de las más intensas registradas en los últimos años. Con temperaturas que alcanzarán picos de hasta 43 grados, la necesidad de encontrar alivio se convierte en una prioridad. Los expertos insisten en la importancia de mantenerse hidratado y evitar la exposición al sol durante las horas más calurosas. Sin embargo, para quienes buscan una alternativa refrescante, los parajes naturales de La Rioja se presentan como la mejor solución.
El cañón del Río Leza
A medida que el sol castiga las ciudades y pueblos riojanos, las pozas del río Leza se erigen como un refugio natural. Este conjunto de piscinas naturales, escondido entre montañas y rodeado de una vegetación exuberante, ofrece un alivio inmediato del calor sofocante. Sus aguas frescas y cristalinas son ideales para un chapuzón, mientras que el entorno sombreado proporciona un respiro del abrasador sol. Es un lugar donde el calor parece desvanecerse, reemplazado por la serenidad de la naturaleza y el susurro del río.
El Pozo de los Aines
En el corazón de La Rioja, el Pozo de los Aines, cerca de Arnedillo, es más que un simple lugar para nadar; es un rincón donde la naturaleza y la historia se encuentran. Este fenómeno geológico, con sus aguas profundas y refrescantes, ofrece una alternativa única para escapar del calor. El pozo, rodeado de formaciones rocosas, crea un microclima fresco que contrasta fuertemente con las altas temperaturas que azotan la región. Además de refrescar el cuerpo, este lugar misterioso alimenta la mente con sus leyendas y su belleza natural.
Embalse de González Lacasa: el ‘mar’ de La Rioja
Cuando el termómetro no da tregua, el Embalse de González Lacasa, conocido como el “Mar de La Rioja”, se convierte en un destino imprescindible. Aquí, la amplitud del embalse y la frescura del agua ofrecen un alivio bienvenido. No solo es un lugar perfecto para nadar, sino que también invita a disfrutar de actividades acuáticas como el kayak y el paddle surf, que permiten desconectar del calor y reconectar con la naturaleza. Los pinares que lo rodean aportan sombra y un aire fresco, completando un entorno perfecto para escapar de la ola de calor.
Pozas Naturales del Gollizo
En el recóndito valle del Jubera, estas pozas ofrecen un rincón pintoresco donde el agua y la roca se encuentran en armonía. Aquí, el río Jubera ha creado un pequeño cañón con cascadas y piscinas naturales, un lugar perfecto para un chapuzón en medio de un entorno salvaje.
Cihuri y el río Najerilla
El río Najerilla y la piscina natural de Cihuri son otros rincones donde las aguas frescas permiten olvidar, aunque sea por un momento, el agobiante calor. En estos lugares, la tradición se mezcla con la naturaleza, ofreciendo espacios donde el tiempo parece detenerse. Las familias se reúnen para disfrutar de un día de picnic junto al río, mientras los más pequeños chapotean en las aguas claras. En medio de la ola de calor, estos lugares se convierten en auténticos paraísos climáticos.
Puente Roto de Ezcaray
Un lugar cargado de historia, donde la naturaleza ha reclamado su espacio. Las aguas del río Oja ofrecen una piscina natural junto al puente derruido, creando un ambiente único para disfrutar de un baño rodeado de verdor.
Cascadas de Puente Ra
Escondidas en el Parque Natural Sierra de Cebollera, estas cascadas ofrecen un paraje espectacular. Aunque el acceso requiere una caminata, la recompensa es un baño en pozas rodeadas de naturaleza virgen.
Las pozas de Vadillos
Dos pequeñas pozas de agua fresca que baja de Monterreal hasta Vadillos, que llegará al Leza entre San Román y Jalón. Una vez superado Vadillos, ya sin cobertura telefónica, siguiendo la vieja carretera hacia la Avellaneda, bajo el puente se encuentras las dos pozas más visitadas por los cameranos durante los días de más calor, aunque el acceso a las mismas es complicado y requiere de hacerlo con precaución y atención.
FOTO: EFE/Raquel Manzanares.
La Rioja, a pesar de las altas temperaturas que trae esta nueva ola de calor, ofrece una variedad de refugios naturales que permiten escapar del calor extremo. Desde las pozas del río Leza hasta el Pozo de los Aines y el embalse de González Lacasa, cada rincón ofrece un respiro fresco y revitalizante. Estos paraísos climáticos no solo alivian el calor, sino que también permiten disfrutar de la belleza natural que define a esta región. Así, mientras las temperaturas suben, los riojanos encuentran en la naturaleza su mejor aliado.
