Ibercaja ha cerrado una nueva operación de financiación a empresas españolas, como parte de su compromiso con el crecimiento del tejido empresarial. En concreto, la Entidad financiará con dos millones de euros la construcción de la nueva sede de Etilisa, compañía referente en la fabricación, impresión y distribución de etiquetas con acabados en los mercados del vino, licores y cervezas artesanas.
El nuevo centro de operaciones de la compañía se alzará en el Parque Empresarial La Maja, en Arnedo (La Rioja), manteniendo las raíces locales de Etilisa. La parcela tiene una superficie de 15.000 metros cuadrados, sobre los que se construirán naves industriales de unos 5.000 metros cuadrados y oficinas de unos 1.000 metros cuadrados, con un coste de entre 2,5 y 3 millones de euros, para continuar con la operativa de la empresa. El espacio restante se utilizará para las ampliaciones previstas por Etilisa como parte de su plan de negocio.
“Desde Ibercaja estamos firmemente comprometidos con el apoyo a nuestro tejido empresarial y por eso contribuimos a su desarrollo a través de estas operaciones de financiación. Esta nos gusta especialmente, al tratarse de un cliente con el que tenemos una larga y cercana historia de colaboración y porque refleja nuestra alianza por el desarrollo de la España rural”, señala José Ignacio Juez, responsable territorial de Banca de Empresas de Ibercaja en La Rioja.
“Las condiciones que nos ofrece Ibercaja son muy buenas para nosotros. Esto demuestra la apuesta de la Entidad por Etilisa y por su crecimiento, con una gran confianza que ha sido mutua durante los casi quince años de estrecha colaboración que acumulamos”, explica Diego Castillo, director general de Etilisa.
Más de una década de colaboración
La operación de financiación no es la primera que Ibercaja cierra con Etilisa. De hecho, la primera de ellas data del año 2010, cuando se constituyó la empresa. Para ello, Ibercaja aportó 360.000 euros para el capital social de Etilisa, el 48 por ciento del total, partiendo de los socios el 52 por ciento restante.
Desde entonces hasta ahora, Ibercaja ha acompañado a la compañía etiquetadora en todo su proceso de crecimiento, apoyándole en el desarrollo de su actividad. Así, cuando comenzó esta colaboración, Etilisa contaba con cuatro personas y cerró 2010 con una facturación de 180.000 euros, mientras que la actual cifra de empleados roza los 50 y la previsión de facturación en 2024 se sitúa en los ocho millones de euros.
Durante estos casi quince años, la Entidad y la compañía etiquetadora han colaborado de forma estrecha, cerrando en torno a diez operaciones de financiación, la mayoría de ellas para la compra de maquinaria. En este sentido, Ibercaja ha aportado capital para la compra de cuatro impresoras digitales por valor de 1,5 millones de euros, así como para la adquisición de seis máquinas de acabado de etiquetas, con un coste de 3 millones de euros.
