Especial Enoturismo

Franco-Españolas, un tesoro centenario de Rioja en el corazón de Logroño

Situadas en la capital riojana, a solo cinco minutos caminando desde el centro monumental y gastronómico de Logroño, cruzando el histórico Puente de Hierro, las Bodegas Franco-Españolas hacen obligada su visita. Y cada año alrededor de 65.000 personas confirman este atractivo.

Desde sus inicios en 1890, esta bodega ha sido un lugar de asombro para los visitantes, incluso figuras históricas como Alfonso XIII y el célebre escritor Ernest Hemingway han atravesado sus puertas. Lo que mantiene viva la magia de esta centenaria bodega familiar es su capacidad para sorprender.

Visitar Bodegas Franco-Españolas no es solo una oportunidad para degustar vinos tan icónicos como Bordón y Diamante, sino también para sumergirse en la rica historia y la cultura vinícola del Rioja. La clave del éxito de esta firma reside en su encanto atemporal, la innovación constante de sus propuestas y la calidad de su oferta.

Aquí se cuida cada detalle y su apuesta por una forma diferente de enoturismo es tan sólida que sus puertas se abren los 365 días del año. La bodega se ha convertido en epicentro cultural de la ciudad gracias a su variada agenda de ocio que va más allá del vino e incluye una oferta cultural para disfrutar del cine, el teatro, conciertos o escape rooms.

Para tomar nota

No hay que olvidar las clásicas experiencias enoturísticas, entre las que destacan las visitas guiadas con cata de los vinos Bordón y Diamante -cuyas primeras añadas datan de 1892–, catas verticales y horizontales, catas comparativas entre los vinos de Bodegas Franco-Españolas (DOCa Rioja) y Bodegas Valparaíso (DO Ribera del Duero), así como enoexperiencias a medida y personalizadas para cada público.

FOTO: Riojapress/ Fernando Díaz.

La agenda cultural del año arranca con Actual Festival, un referente musical a nivel nacional. En el mes de mayo cinco compañías de teatro se debaten el podium en cinco escenarios de la bodega durante el certamen +Teatro con diamante, con el espectador como jurado. En julio es la noche de los jueves, cuando los jardines de Franco-Españolas se transforman en un gran cine de verano. En agosto, la temporada estival se despide a lo grande con la gran cita del MUWI Fest. En noviembre es el turno del tenebroso Hallowine en formato escape room, y para terminar el año, la pasarela Moda y Vino con cinco intervenciones en salas centenarias de la bodega al mismo tiempo que el Espacio Moda y Vino presenta las creaciones de 25 diseñadores en el que es el mejor escaparate para las compras navideñas.

Además, el espacio de la bodega es ideal para celebrar cualquier evento de relevancia. Un lugar soñado para festejar la vida y brindar con grandes vinos de Rioja.

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