“Una experiencia de compra que no la da Amazon”, así describía el alcalde de Logroño a la Feria de Oportunidades de Logroño, LogroStock. Una cita que este año cumple sus 22 añitos con la participación de 124 comercios de 30 sectores diferentes repartidos en 178 expositores ubicados en el céntrico paseo de El Espolón.
Una cita que se ha convertido en la feria de oportunidades más importante del norte de España y en un escaparate de la calidad de los comercios logroñeses así como un punto de referencia comercial. Y si no que se lo digan a Eva que, desde Morato Ópticos, lleva repitiendo 20 años.
“Está más que comprobado que Logrostock se ha convertido en una cita fundamental para la gente de fuera. Aquí, cada año viene gente de Navarra, País Vasco… que llegan exclusivamente para la cita. Son los llamados clientes Logrostock. Y hay muchos, te lo puedo asegurar”.
Para Eva esta edición está siendo una de las más exitosas. “El tiempo nos está dando una tregua y no nos esperábamos tanta gente. Nos está yendo sorprendentemente muy muy bien”.
Si paseas por los 178 puestos, siempre hay un par de sectores que reúnen en sus escaparates al aire libre a muchos visitantes. El menaje y la zapatería continúan siendo los reyes de la feria. Anabel lo confirma: “El calzado nunca falla. Además, estamos sacando todo de temporada y la gente está muy interesada en la compra este año”.
Para Cristina es su primera vez en Logrostock. Este año estrena tienda, Azento, y estand. “Está siendo una experiencia espectacular. Estamos muy contentos porque la gente se está acercando mucho. Llegan, miran, dan una vuelta y vuelven a comprar. Además es la mejor manera de que nos conozcan y nos ubiquen”.
Precisamente para facilitar la localización de cada estand está el personal del Punto de Información. Pedro responde a las preguntas de los visitantes, “que llegan a nosotros para que le localicemos un estand concreto o les marquemos en el mapa los que hay de cada sector”.
Para este joven esta 22 edición está yendo más que bien. “Se ve a mucha gente y de hecho varias tiendas ya han venido hasta el punto para pedirnos más bolsas porque se les habían acabado”.
Es lo que le está debiendo pasar al puesto de Deportes Ferrer que, según Pedro Ferrer, “estamos haciendo récord de ventas. Está siendo espectacular. Sobre el año pasado ya llevamos más de un 20 por ciento de crecimiento”.
Para Ferrer Logrostock es una cita fija. “Nunca hemos fallado”, y es que es una muy buena oportunidad para vender productos de otras temporadas “aunque nosotros, la mayoría de artículos que sacamos son novedades de esta misma temporada”.
Y mientras se ‘bichea’ y se compra, paradita en el camino para retomar fuerzas. Pangastea también se estrena en esta edición con sus dulces: croissants, donuts, napolitanas… y está triunfando.
Otros que no fallan desde 2019 son los chicos de Purpurina, la tienda que vende productos realizados por personas con autismo. Artem está al pie del cañón en su puesto y explica que “Logrostock es una muy buena ayuda para que pequeños y medianos comercios de la ciudad se expandan”.
Hasta aquí todo muy positivo, pero también hay comercios que no están de acuerdo con sus compañeros y aseguran que “esto es positivo en estas fechas, pero quita muchas ventas durante el año”.
Paco, desde Irama, lleva en Logrostock desde que “se puso por primera vez en el Ayuntamiento”. Confiesa que todo tiene su parte buena y parte mala, pero “este año yo veo menos ambiente que otras veces”.
Lo mismo señala Ana desde Miniprecio murciano, otro de los comercios que no se pierden la feria de oportunidades desde que empezó hace más de 20 años. “Yo esta vez lo estoy viendo más flojo, y no porque vaya a llover o no, sino porque a gente está con miedo a gastar”.
