La bodega Marqués de la Concordia Family of Wines avanza en su proceso de venta para recuperar la actividad vinícola. Tras entrar en un concurso de acreedores en noviembre de 2022, el pasado mes de enero se hizo público que la compañía iba a vender todos sus activos tras entrar en fase de liquidación. Es Insolvia quien ejerce como administrador concursal y quien ha encargado a la auditoría KPMG que gestione la venta de la unidad productiva.
Así lo publica el diario ‘Expansión’, quien confirma que la operación servirá para cubrir el pasivo del concurso de acreedores, que según el informe del administrador concursal asciende a alrededor de 60 millones de euros. Una operación que abarca también los negocios de Hacienda Zorita y Vega Reina, en Castilla y León, y la de Marqués de Monistrol, bodega catalana dedicada al cava. El administrador concursal pretende con esta actuación mantener el negocio y el empleo de la firma del grupo.
Por otro lado, en dicha información se refleja que es el juzgado quien debe determinar si la quiebra de la compañía es imputable a sus antiguos administradores (concurso culpable) o si obedece a factores externos no atribuibles a éstos (concurso fortuito).
Tanto el administrador concursal, como los acreedores y a la propia concursada deben emitir informes para argumentar cómo debe calificarse dicho concurso. Tanto Insolvia como Metric ya han pedido que el concurso sea calificado como culpable, la cual no tiene consecuencias penales, pero sí civiles, ya que se pueden exigir responsabilidades económicas de la compañía o que los administradores sean inhabilitados para actuar en otras empresas.
