La compañía Bodegas Riojanas obtuvo un beneficio neto de 145.000 euros al cierre de 2023, un 84,12 por ciento menos que el año anterior, según el informe de resultados remitido este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La empresa, con sede en Cenicero y dueña de marcas como Viña Albina, Monte Real, Puerta Vieja o Viore, entre otras, facturó casi 17,3 millones de euros el año pasado, un 5,1 por ciento menos en comparación con las ventas de 2022.
En 2023 las ventas totales alcanzaron los 4,2 millones de litros, equivalentes a 5,6 millones de botellas, datos muy similares a los de la campaña anterior (4,3 millones de litros, equivalentes a 5,7 millones de botellas).
El ebitda a 31 de diciembre de 2023 superó los 2,6 millones de euros, un 13,58 por ciento menos que en el ejercicio anterior. La deuda financiera neta se acercó a 20,3 millones, ligeramente superior que los 19,1 millones que tenía al final de 2022.
El patrimonio neto descendió hasta los 20,7 millones, frente a los 21 millones del año anterior. Bodegas Riojanas ha señalado en un comunicado que en 2023 enfrentó una coyuntura “muy compleja” debido al “relevante” descenso de la demanda en los principales mercados del vino.
“Esta debilidad de la demanda ha afectado principalmente al consumo de vinos tintos mientras que la demanda de vinos blancos ha tenido un comportamiento positivo”, ha indicado. Adicionalmente, ha destacado que 2023 estuvo marcado por un fuerte repunte del euríbor que encareció la financiación externa.
