La Policía Nacional ha detenido a una pareja (29 y 28 años) por un presunto delito contra los derechos de los trabajadores en Logroño. La pareja residía en Barcelona y trabajaban como autónomos en una empresa riojana dedicada al transporte y a la logística, que a su vez subcontrataba a personas en situación irregular para la conducción de camiones. Las jornadas eran de diez horas y los sueldos ascendían a setecientos euros para bajar posteriormente a seiscientos.
Una de las víctimas denunció a la pareja en comisaría. El hombre (39 años) explicó que trabajaba como chófer en un camión de reparto, pero que nunca había tenido contrato laboral porque se encontraba en España en situación irregular. Afirmó también que su jornada laboral siempre excedía de las ocho horas y que no tenía tiempo ni para comer.
Otro trabajador denunció hechos similares. En concreto, la inexistencia de un contrato laboral por encontrarse este en situación irregular en el país y jornadas de más de ocho horas por setecientos euros. Este segundo hombre trabajó para la pareja desde agosto de 2022 hasta junio de 2023 y señaló que había días que su jornada de trabajo era de hasta dieciséis horas por el mismo salario.
Durante una Inspección de Trabajo en esta compañía, la Policía Nacional identificó a los dos denunciantes. El encargado de la empresa de logística indicó que no tenía conocimiento de la situación irregular de ambos, ya que ellos no trabajaban para la empresa directamente sino para la pareja de autónomos de Barcelona.
Los detenidos ‘poseían’ rutas de reparto que gestionaban ellos mismos, aportaban sus vehículos y contrataban a sus trabajadores. Sin embargo, realizaban contratos ilegales a trabajadores sin permiso de residencia o de trabajo. Aprovechaban así su situación de necesidad ofreciéndoles sueldos precarios, muy por debajo de la media salarial, y un exceso de horas diarias de trabajo.
La pareja realizaba el ingreso en la cuenta bancaria de los varones bajo el concepto de ‘Ayuda familiar’ para eludir los controles legales. Incluso obligó a uno de estos trabajadores a abrir una cuenta prepago en Correos para realizarle el pago mensual del sueldo. En otras ocasiones, pagaban en mano o a través de aplicaciones móviles.
La Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras detuvo a la pareja en Logroño cuando realizaban cuestiones administrativas. Nacidos en Ecuador y con nacionalidad española, ambos carecen de antecedentes policiales previos.
