Cinco comunidades autónomas nunca dan el cien por cien de la beca comedor, tres condicionan su concesión a requisitos extras al umbral de renta y siete la supeditan a su disponibilidad presupuestaria, una fotografía que refleja la disparidad territorial, la complejidad administrativa.
Se trata de Baleares, Cantabria, Madrid, La Rioja y Navarra, según los datos de un análisis divulgado por la ONG Educo con motivo de la vuelta a clase, que este martes ha instalado un plato gigante en la estación de Atocha para denunciar que un 13 por ciento de los niños y niñas en situación de dificultad socio-económica no reciben ayuda comedor, es decir, en torno a un millón de escolares.
Respecto al pasado año académico, se ha producido una “pequeña” mejora y, en general, se “darán (este curso) más becas comedor, pero no lo podemos celebrar porque sigue siendo escandalosa” la falta de ayudas, ha explicado en rueda de prensa la directora general de Educo, Pilar Orenes.
Se une a ello que en Cataluña, Madrid, Navarra o Asturias subirán el precio del comedor, aunque ello no impacte en quienes reciben beca, ha añadido la directora de Incidencia e Investigación de Educo, Macarena Céspedes, que ha pedido un calendario ajustado al escolar para que evitar que haya familias que reciben la beca en enero.
El informe, ‘La receta de este curso: 10 ingredientes para que el sistema de becas asegure el acceso al comedor de la infancia vulnerable’, muestra que todos los sistemas de becas comedor de las comunidades tienen carencias importantes, en un país donde casi uno de cada tres menores de 18 años –27,8 por ciento- vive en riesgo de pobreza.
El estudio analiza los complejos sistemas de las administraciones autonómicas para recibir este apoyo económico y explica, en gran parte, por qué hay tantas familias sin recursos que no pueden llevar a sus hijos e hijas al comedor escolar.
El comedor escolar garantiza no solo una comida completa al día, sino que los niños disfruten de un entorno seguro donde compartir con sus compañeros, aprender a relacionarse y hábitos de higiene y salud, ha explicado Gabriela Aguilar, madre de dos niños beneficiaria de las becas comedor que concede Educo desde hace una década.
En el informe, la ONG denuncia que cada comunidad autónoma utiliza fórmulas diferentes para definir la población infantil que puede beneficiarse de las becas.
De esta forma, con una familia formada por dos personas adultas y dos hijos o hijas, en la Comunidad de Madrid tiene que ingresar menos de 12.000 euros anuales para optar al 80 por ciento de la beca comedor. En Cataluña la misma familia ingresando menos de 14.321 euros podría recibir el 100% de la beca. En el caso de Extremadura, la beca completa se puede solicitar con unos ingresos inferiores a 15.329 euros y en Galicia con menos de 28.000. En Castilla–La Mancha la renta máxima para pedirla son 6.717 euros mientras que en Castilla y León se necesitan 15.039 euros.
“Con la misma renta familiar, un niño o niña puede optar o no a las ayudas para el comedor dependiendo de donde viva”, por lo que proponemos que se use como baremo mínimo para pedir la beca el umbral de pobreza” que establece el INE, ha añadido Orenes.
Por otro lado, el informe de Educo recalca que cinco comunidades – Baleares, Cantabria, Madrid, La Rioja y Navarra- no dan nunca el 100 % de la beca, es decir, la gratuidad total por renta familiar. Y en tres —Canarias, Cataluña y Comunidad Valenciana— el 100% está condicionado a otros requisitos, como que exista una valoración de servicios sociales.
Por otro lado, en siete de las 17 comunidades se asignan becas por un concepto conocido como “concurrencia competitiva”, es decir, que se dan según la disponibilidad de presupuesto que haya para ese fin, dejando a niños, niñas y adolescentes sin ayudas aun cumpliendo los requisitos, ha explicado Céspedes.
Se trata de Aragón, Asturias, Baleares, Canarias, Castilla y León, Comunidad Valenciana y Murcia donde el límite presupuestario obliga a establecer unos criterios de puntuación para ver quién las recibe, de manera que las familias acaban compitiendo.
También ha criticado que las autonomías cubran de forma desigual la diversidad familiar y, por ejemplo, solo Andalucía, Galicia y País Vasco ofrecen el 100% de la beca a los núcleos monoparentales que están justo en el umbral de la pobreza ya tengan uno, dos o tres hijos. En otros territorios, estas familias pueden recibir el 50, el 60 o el 75 por ciento.
Denuncia además que los trámites para pedir las becas son muy complejos: “Es necesario un máster para acceder”, según Céspedes.
