La Rioja

La AIReF empeora sus previsiones para la economía riojana

La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha empeorado las previsiones de cierre para la Comunidad Autónoma de La Rioja y estima un déficit del 0,3 por ciento del PIB en 2023.

En su ‘Informe sobre la ejecución presupuestaria, deuda pública y regla de gasto 2023’, presentado este jueves, la AIReF estima que la ratio deuda/PIB de la comunidad riojana se situará al cierre del ejercicio en un 16,8 por ciento. Dado el contexto en el que se enmarca actualmente la elaboración de los presupuestos para 2024, la AIReF recomienda a la comunidad que evite incrementos de gastos o reducciones de ingresos de carácter estructural financiadas con cargo al incremento de ingresos temporal que se producirá en 2024.

También aconseja que tenga en cuenta la aplicación de la regla de gasto, aunque suponga alcanzar temporalmente una situación de superávit.

En el ámbito nacional, la AIReF ha mejorado en cuatro décimas su previsión de crecimiento del producto interior bruto (PIB) este año, hasta el 2,3 por ciento, aunque mantiene la del déficit público en el 4,1 por ciento del PIB, dos décimas por encima de la tasa fijada por el Gobierno.

En este informe, la AIReF ha actualizado sus previsiones macroeconómicas, en las que también ha rebajado su estimación del IPC al 3,7 por ciento en 2023 (tres décimas menos que en su anterior previsión).

La aportación al PIB está repartida a partes muy similares entre la demanda nacional y el saldo exterior, aunque destaca la contracción del consumo privado, que avanza un 0,8 por ciento, dos décimas menos que en su previsión anterior y más de tres puntos por debajo de la tasa de 2022. Por el contrario, la AIReF prevé que la exportación de bienes y servicios avance un 6,1 por ciento este año, una décima más respecto a su previsión anterior.

En lo que se refiere a la deuda, proyecta una reducción de 3,1 puntos de PIB hasta el 110,1 por ciento a final de 2023. La AIReF explica que la prórroga de las medidas para afrontar la subida de los precios energéticos y los efectos de la guerra en Ucrania “suponen un incremento del déficit de dos décimas de PIB”, si bien este se ve “compensado” por la mejora de las previsiones de crecimiento económico.

En una nota de este jueves, la AIReF señala que “la economía española habría sorteado mejor la crisis energética en los últimos tres trimestres que el conjunto de la zona del euro”, si bien avisa de “una moderación del crecimiento” en la segunda parte del año por “la transmisión de las subidas de tipos de interés hacia la economía real”.

En este sentido, apunta que ese efecto se materializará plenamente en la segunda mitad de este año y en el siguiente y que, además, la persistencia de tasas de inflación elevadas en el conjunto de la zona euro pueden llevar a una política monetaria más restrictiva durante un periodo más prolongado.

La AIReF también ha mejorado levemente -una décima menos- la tasa de paro esperada para este año, hasta el 12,4 %, y prevé asimismo un crecimiento del 4 por ciento del coste laboral unitario y del 4,8 por ciento en el caso de la remuneración por asalariado.

La AIReF recomienda tasas de gasto por subsectores

En el capítulo de recomendaciones, la AIReF insta al Gobierno a proponer tasas de aumento del gasto para cada subsector, con el objetivo de garantizar el cumplimiento de la recomendación europea de no elevar el gasto primario neto por encima del 2,6 % el próximo año, que en su opinión se encuentra en riesgo.

A falta de una senda fiscal -que no se ha aprobado por la convocatoria electoral-, en estos momentos las únicas referencias con las que cuentan las comunidades autónomas y corporaciones locales para elaborar los presupuestos del próximo año son las del Programa de Estabilidad -equilibrio y superávit del 0,2 por ciento, respectivamente-.

Estos umbrales permitían elevar el gasto primario neto del conjunto del Estado un 4 por ciento, lejos de la recomendación europea, por lo que recomienda a comunidades autónomas y corporaciones locales evitar aumentos de gasto o reducciones de ingresos de carácter estructural.

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