La Rioja

‘La pistola’: una familia, una generación y un valle reviven en la pantalla

No hay más que ir a una antigua enciclopedia o poner un nombre el Google para conocer la historia de personajes ilustres, esos que se supone que hicieron algo relevante por la humanidad. Más complicado, casi siempre, es conocer nuestra propia historia, la de nuestros antepasados; esos que con su esfuerzo, sus vivencias y su día a día consiguieron que cada uno estemos hoy en la silla en la que nos encontramos.

No es fácil recopilar las historias de gente humilde que siempre entiende que sus vivencias son como las de los demás, pura cotidianidad, pero que encierran dentro de la sencillez momentos únicos, vivencias de superación o grandes hazañas dentro de la normalidad del día a día.

Es nieta de Andresa, Benito, Manuel y Montserrat y aunque ya sólo puede disfrutar de la última, Andrea Soldevilla, conoce casi al dedillo la historia de sus abuelos. Primero por lo que, desde niña, le contaban sus padres; ahora, por todo el material que ha ido recogiendo de ellos, amigos y tíos para realizar su documental ‘La Pistola’ que se estrenará el próximo 13 de mayo en el auditorio municipal de Autol.

Catona, ingeniera, actriz y residente en Madrid, esta joven dedicó gran parte de su verano a grabar un documental de más de una hora en el que cuenta la historia de su familia y, a través de ella, de toda una generación que poco a poco se va perdiendo y de un valle, el del Cidacos, que en su humildad guarda historias increíbles de un tiempo en el que la guerra y el Franquismo dejó huella en sus habitantes.

‘La pistola’ es un repaso por los años mozos, los matrimonios, los trabajos, el día a día de una familia que bien pudiera ser la de cada uno de los riojanos que habitan en cada uno de los valles de la región. “Quería mostrar cómo había sido la vida en una zona rural en aquellos años a través de los recuerdos de los hijos y los nietos de mis abuelos que ya no viven y así dejar testimonio de esa generación, que fuese una muestra lo más real posible de lo que vivieron”.

El nombre del documental nada tiene que ver con la violencia. A la familia de Andrea les pusieron hace décadas el mote de ‘Los Pistolas’ y de ahí surgió el título de una serie de conversaciones en diferentes emplazamientos que van hilando una historia de hombres trabajadores, mujeres adelantadas a sus tiempos, familias numerosas, campo, vino, trenes…

Y es que si su abuelo materno trabajó de peón en la bodega del XVIII de Ontañón en el laborioso y duro trabajo del vino en aquella época, el paterno lo hizo en la yesera. “Un trabajo muy duro en el que había que hacer un poco de todo, desde dinamitar, hasta hacer el poli, cargar los sacos…”. Murió joven, con 58 años. Un cáncer de pulmón se lo llevó.

Y así, poco a poco, de va conociendo a través de la imagen y las palabras a qué jugaban las niñas de la época, cómo de conocían las parejas, el sentido de los ‘hermanos de leche’ o los problemas que tenían las mujeres para poder conservar sus trabajos. “Mi abuela fue controladora de tener en Quel, de la vía ya desaparecida que unía Calahorra y Arnedillo, con 11 hijos (tres de ellos fallecieron) le intentaron quitar el puesto pero no se dejó”, relata Andrea.

Destinos de la guerra (“el abuelo estuvo en la Sierra de Albarracín”, le cuenta su tío) o reflexiones trascendentales (“el mundo es como es, es muy difícil de explicar mira que es increíble lo de Dios y eso es lo más creíble de todo”). Historias que, antes de que se pierdan, se podrán disfrutar en el auditorio municipal de Autol gracias a la colaboración de varias empresas (Ontañón, Electra Autol, destilerías Picuezo) que apoyaron el proyecto a través de crowdfunding y cuyas entradas pueden adquirirse desde ya en la página web entradium.com.

Subir