Diez ediciones desde aquel 2013 en el que el Ayuntamiento de Pradejón decidió poner en valor a lo largo de todo un fin de semana sus dos productos más preciados: la seta y el champiñón. Desde entonces, la feria ha ido, poco a poco, creciendo en actos y ampliando la propuesta cultural que permite dar a conocer no sólo estos productos que nacen de los más profundo de las bodegas pradejoneras sino también un municipio que con el paso de los años ha pretendido darle una vuelta a su fisionomía para ser más atractivo para el turista que llega a sus calles.
Rutas por las bodegas de champiñón (las tradicionales y las más novedosas), visitas guiadas a la recientemente estrenada Bodega de los Diezmos, rutas a los murales que engalanan las calles del municipio, una tarde de gastrovino en el Barrio de Bodegas y una ruta, que nadie puede perderse, por los establecimientos de la ciudad que ofrecen pinchos en los que el champiñón y la seta son los auténticos protagonistas de las barras.
Así, la feria comienza a partir de este jueves con su inauguración y el nombramiento del embajador del champiñón y la seta que este año será Francis Paniego. El acto contará también con un espectáculo de correrá a cargo del ballet Embrujo Español y a partir de ese momento los actos se trasladarán a los bares para disfrutar de los pinchos elaborados.
El viernes habrá vistas a los cultivos, ruta por los murales, un espectáculo infantil y una tarde de gastrovino en el Barrio de las Bodegas. Además todo esto se complementará con un concierto de música española.
Además, el sábado están previstas nuevas rutas y la primera de las catas en el restaurante Chandro. Además, entre las novedades, habrá un espectáculo de gastronomía creativa a cargo de la Escuela de Hostelería que irá acompañado de un espectáculo circense. Esta vez llegará el turno de la música rumana con un concierto para conocerla y disfrutarla.
Como cierre del evento, el domingo, se celebrará la Feria Intercultural a lo largo de todo el día. Degustaciones de tés y postres internacionales, concurso de calderetas, una nueva fungicata, talleres de caligrafía árabe, catas de miel, un concierto de música árabe para poner el colofón con la entrega de los Fungi de Plata al pincho y a la caldereta ganadores de este año.
