Hace algo menos de un año era una de las personas con más posibilidades para encabezar la lista del PP al Parlamento de La Rioja. Fue el primero en bajarse de la ‘lucha’ de candidatos con la llegada de Gonzalo Capellán y se sumó a su proyecto desde un principio. Alfonso Domínguez (Arnedo, 1976) es, posiblemente, una de las pocas personas en España que ha tenido que dar tres ‘sí quiero’ en pocos días. Uno, este sábado, a su actual mujer, Cristina Maiso, y los otros dos al PP con la curiosidad de que ambos son para cerrar listas. La primera, al Parlamento de La Rioja; la segunda, a la Alcaldía de su Arnedo natal.
Podría entenderse como un acto de generosidad en un momento en el que los dieciséis primeros puestos al Parlamento cotizaban más que nunca en las filas populares, pero él lo ve como un simple gesto de “confianza en el proyecto”. Mientras algunos se daban codazos por estar en puestos de salida, él se hacía en silencio con uno de esos puestos que son simbólicos pero que tienen una carga importante en el Partido Popular.
“El puesto 33 para el Parlamento de La Rioja y el 17 para la Alcaldía de Arnedo son los que más ilusión me han hecho desde que estoy en política”, asegura el secretario general de los populares en La Rioja. El del Parlamento, porque “el de Gonzalo Capellán es mi proyecto político porque es mostrar confianza en un equipo renovado, joven y determinado a ganar”. El de Arnedo, si cabe aún más: “Es mi pueblo y es una forma de dar apoyo a Jesús Rubio, una persona que ha hecho una apuesta personal por el partido dejando a un lado su prometedora carrera como periodista”.
Confía en que las dos candidaturas serán ganadoras tras las elecciones del 28M. “Toda mi energía está en llevar al partido a ganar las próximas elecciones regionales, el 42 por ciento de los riojanos confían en el PP según todas las encuestas independientes y queremos que ese porcentaje aumente”. También confía en la candidatura de Arnedo. “Estoy seguro de que Jesús será el próximo alcalde porque hay que mover Arnedo que ahora está parado”.
El cierre de las listas siempre es anecdótico pero importante. “Cuca Gamarra cierra la de Logroño, Ayuso la de Bilbao…”, pero él sólo lo ve como un gesto de confianza absoluta sin pensar en futuros cargos políticos en un hipotético gobierno. “Ahora el horizonte es el 28M, no pienso en nada más”.
Echará de menos el Parlamento y los tiras y aflojas con sus adversarios políticos. “La verdad es que he disfrutado mucho en estos cuatro años”. Pero no estará lejos a pesar de su posición en las listas.
