La SD Logroñés ha vencido al líder Eldense (2-1), tras una remontada memorable en la segunda mitad. Soberón ha adelantado a los valencianos en el primer tiempo, pero los tantos de Córdoba y Unzueta a la salida del descanso le han dado la vuelta al encuentro. Otra noche épica para los de Raúl Llona, para quienes el fútbol se juega en el campo y no sobre un papel. Como resultado, los logroñeses alcanzan los 43 puntos y su salvación virtual. Su coraje, sacrificio y buen fútbol han tenido premio. Es la segunda vez que los blanquirrojos tumban al líder en Las Gaunas en esta campaña, pues también cayó el Castellón.
Los visitantes han saltado sin contemplaciones. Soberón ha avisado una vez y a la segunda, ha enganchado un disparo cruzado ante el que Jero Lario no ha podido hacer nada. Otra vez la ley del ex, porque Soberón vistió de blanquirrojo y dio un gran rendimiento en Logroño. Una vez por delante, los de Fernando Estévez han tenido un tramo de gran nivel. Presión, intensidad, jugadas al primer toque e ideas muy claras. Con menos pelota que de costumbre, los locales han tardado en reaccionar. La primera oportunidad ha llegado tras un centro de Diego Esteban, de vuelta a la titularidad, rematado certeramente por Gexan.
Poco a poco, los riojanos han intensificado sus ataques, aunque no ha habido puntería. El Eldense tenía muy claro qué hacer y se ha defendido de forma muy sólida, cerrando bien sus laterales e impidiendo el agobio local. Tampoco es que el árbitro ayudara demasiado, sin dejar jugar y con varias amarillas a la Sociedad que han caldeado los ánimos. Sobraban intenciones, pero faltaban apuros para un Vallejo muy protegido por su defensa y sin tener que intervenir. Aun así, su actuación ante el mejor equipo de la liga estaba siendo muy digna. En la recámara estaban los minutos de gloria.
El asueto le ha dado un nuevo aire a la SD Logroñés, que ha encontrado la pegada que le faltaba. Primero Unzueta ha recortado sobre la frontal y ha disparado a centímetros de la escuadra. En la posterior, Córdoba ha recibido en la misma zona, se ha perfilado hacia la media luna y ha marcado un gran gol. Ese 1-1 ha levantado a un equipo convencido de que podía ganar. Tanto ímpetu y ganas han demostrado los de Raúl Llona que han tenido premio. Acoso y derribo constante, tiro desde la frontal y rechace a placer para que Unzueta marcara el segundo. Remontada exprés en menos de diez minutos, para deleite de una afición eufórica.
Y es que los blanquirrojos llevan la competición en la sangre. Su lenguaje corporal lo decía todo: metidos en el partido, agresivos, intensos, en el mejor momento de su historia. La compenetración se reflejaba en el campo, en un grupo de jugadores quenunca pierden su identidad. Por delante, todavía casi media hora de batalla por todo lo alto. El Eldense ha buscado el empate con ahínco. Primero, un disparo de Ortuño, prácticamente bajo palos, no ha entrado milagrosamente. Y después, en una contra peligrosísima, Jero Lario se ha hecho enorme y ha despejado un mano a mano, antes de que el delantero fusilara.
Raúl Llona vivía estos minutos con intensidad y ha decidido mover ficha, dando entrada a Emilio y Samanes. Nada más salir, el ‘7’ ha estampado en la cruceta una falta lejanísima. Si eso entra, es uno de los tantos del mes. La Sociedad podría haber recurrido al otro fútbol, parar el partido y hacer que no ocurriera nada. Pero no. Ha decidido intercambiar golpes y ha salido victoriosa. Esa propuesta más grande al fútbol. Además de ganar, encima divierte. Y todos aportan. Manny ha jugado solo diez minutos, pero ha podido hacer el tercero en dos ocasiones. Increíble.
Y en ese camino, el derbi ante el Calahorra (domingo 17:00) será una oportunidad de cerrar la permanencia a ocho jornadas del final. Palabras mayores y una grada entregada tras un pitido final recibido con algarabía y euforia.
