La borrasca Juliette formada en el Mediterráneo ha dejado nuevas nevadas en cotas bajas del norte peninsular con numerosas carreteras afectadas, especialmente secundarias y con especial intensidad en Baleares, donde persiste la alerta por riesgo extremo, ahora por temporal marítimo y olas de más de 8 metros.
El aire frío “que ha llegado impulsado en parte por la borrasca Juliette, junto con un anticiclón situado al norte de las islas británicas”, está dejando temperaturas gélidas, por debajo de lo normal para la época en muchas zonas y nevadas en cotas muy bajas, ha explicado este martes el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) Rubén del Campo.
Durante esta jornada, Valdezcaray ha sido la zona donde se han registrado las temperaturas más bajas: ocho grados bajo cero. Además, Moncalvillo ha visto cómo los termómetros marcaban los 7 grados bajo cero y Villoslada y Santa Marina han rozado los -6.
De acuerdo a las predicciones, continuarán en las próximas horas las nevadas en Mallorca aunque la cota irá subiendo hasta situarse por encima de los 900 metros. Por debajo de esos niveles, según del Campo, lloverá con intensidad, podrá caer granizo y el oleaje será “un peligro extremo”, advierte el portavoz de la Aemet.
En la jornada de este martes, según el portavoz de la Aemet, las cotas peninsulares serán de cero a 300 metros en el nordeste mientras en otras zonas del norte se prevén espesores de 2 a 5 centímetros, puntualmente mayores y a partir de unos 400 o 500 metros en las comunidades cantábricas, norte de Castilla y León, Navarra y La Rioja.
A media mañana la situación de las carreteras había mejorado y era necesario circular con precaución solo en dos de la red principal a causa de la nieve, en concreto, en la A-67 a su paso por Pesquera, en Cantabria, y en la AP-1 a la altura de Cardeñajimeno (Burgos). Del resto de carreteras algo más de 600 kilómetros continuaban afectados por la nieve, de los cuales casi 500 kilómetros requerían cadenas en determinados tramos o estaban puntualmente cortados al tráfico, especialmente en zonas de montaña de comunidades como Asturias, Aragón, Cantabria, Castilla y León y en Baleares.
Según la Aemet, está previsto que las temperaturas diurnas tiendan a subir, y lo harán de forma notable en el este peninsular, aunque seguirán sin pasar de los 6 u 8 grados en muchos puntos del territorio.
En las últimas horas la nieve se ha dejado ver en zonas costeras de la mitad norte, por ejemplo en ciudades como San Sebastián o en el Mediterráneo, en puntos de la costa de Tarragona o en la propia ciudad de Barcelona.
También el viento ha sido muy intenso en el extremo oriental mallorquín, y asimismo en zonas en zonas montañosas de la península durante la madrugada. Por ejemplo, en el alto del León, en la comunidad de Madrid, se han superado los 105 kilómetros por hora.
De cara a este miércoles, se prevé un arranque de la primavera meteorológica “realmente fría”, según Rubén del Campo, con temperaturas mínimas de nuevo muy bajas, inferiores a los 8 o 10 grados bajo cero en zonas de montaña y probablemente también en páramos.
Serán mínimas entre 5 y 10 grados por debajo de lo normal para la época del año en la mayor parte de la Península y las máximas también serán frías, ha explicado el portavoz de la Aemet.
Habrá nevadas a partir de unos 200 metros, o puntualmente incluso por debajo, en el este de Galicia, interior de Asturias, Cantabria, norte de Castilla y León. No se descartan además nevadas en cotas bajas del País Vasco y norte de Navarra.
