El Espacio Lagares de Logroño acoge este viernes, a las 19:00 horas, la presentación del libro ‘Volver a Casa. Exhumaciones de víctimas de la Guerra (1936–1939) en La Rioja’, editado por el Observatorio de Derechos Humanos del Gobierno de La Rioja.
‘Volver a Casa’ es un libro editado por el Observatorio de Derechos Humanos del Gobierno de La Rioja y financiado por los fondos de Memoria Democrática del Ministerio de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática.
Esta investigación está coordinada por Carlos Muntión junto a un equipo conformado por Tomás Llanos Justa, José María Lander Fernández, Emilio Barco y Jesús Vicente Aguirre que recoge tanto las primeras exhumaciones llevadas a cabo en los años 70 con muy pocos medios, hasta las realizadas en la actualidad con una tecnología mucho más avanzada. Este libro supone una recopilación que da nombre y apellidos a 450 riojanos exhumados durante este periodo de tiempo.
La directora general de Participación y DDHH, Sara Carreño ha explicado que “articular políticas públicas en defensa de la Memoria Democrática afecta no solo a nuestro pasado sino a nuestro presente y futuro como fundamento de una verdadera cultura democrática cumpliendo con los principios de Verdad, Justicia, Reparación y Garantías de No Repetición. Por esta razón, las acciones, como la realización de este libro constituyen un eje prioritario en la estrategia del Gobierno de La Rioja, desarrolladas desde la Dirección General de Participación Ciudadana y Derechos Humanos”.
Por último, la Directora General ha querido enfatizar que “ojalá la información que aquí se contiene sirva para que en un futuro todos y todas hayan podido volver a casa”.
Por su parte la asesora del Observatorio de DDHH, Esmeralda Figueiras ha expresado: “Gracias a esta investigación podemos conocer la terrible tortura que sufrieron cientos de familias, sin saber dónde estaban sus familiares, dónde murieron, dónde fueron vilmente asesinados y asesinadas por defender la democracia. Sirva también este libro como homenaje a todas aquellas personas que, con sus manos, con más emoción que medios, exhumaron a los suyos; a todas aquellas personas, descendientes de quienes nunca se dieron por vencidos, que hasta el día de hoy trabajan para que no olvidemos la barbarie que segó tantas vidas”.
