El PP proclamará a sus candidatos autonómicos a las elecciones de mayo y a los de capitales de provincia antes de que finalice este 2022, según ha anunciado este viernes la secretaria general de la formación, Cuca Gamarra, en una reunión con los responsables orgánicos de los diferentes territorios.
Este compromiso supone que antes de que termine el año deben resolverse las incógnitas sobre el candidato que perviven en Asturias y en Aragón, donde Jorge Azcón debe decidir si busca revalidar la Alcaldía de Zaragoza u opta por competir contra Javier Lambán por el Gobierno autonómico.
En los últimos días el PP ha elegido ya a Gonzalo Capellán como su candidato en La Rioja, mientras que el PP de Navarra celebrará su congreso el 4 de diciembre, con Javier García como candidato a presidir el partido, mientras sigue en el aire la coalición con UPN.
La número dos de Alberto Núñez Feijóo y su vicesecretario de Organización, Miguel Tellado, han reunido este viernes en Génova a los secretarios generales autonómicos de la formación para coordinar la estrategia de cara a los comicios de mayo, que el PP ve como la antesala de una posible victoria en las elecciones generales.
Emular a 1995 y 2011
El PP quiere emular en mayo de 2023 lo ocurrido en 1995 y en 2011, cuando el éxito en los comicios autonómicos y locales fue el preludio de los Gobiernos de José María Aznar y Mariano Rajoy, respectivamente, y así lo ha verbalizado Gamarra ante los suyos: “vivimos otras etapas donde lo hicimos y queremos volverlo a hacer”.
Para “asentar” a las urnas un cambio de ciclo político que el PP detecta ya en la calle, la dirección nacional ha pedido dos cosas a los territorios: “unidad” como “requisito ineludible” y hacer “política útil”, ofreciendo en los programas electorales soluciones frente a un Gobierno, el de Pedro Sánchez, al que ven “desnortado” y lastrado por sus diferencias internas.
FOTO: PP.
“Si otros son la fuente del problema, nosotros somos la garantía de las soluciones”, ha señalado Gamarra, que ha pedido que el PP sea un partido “fuerte”, “unido” y que haga “política de la moderación”, con principios como la defensa de la Constitución, el estado de derecho, la separación de poderes o la igualdad entre españoles.
La dirección nacional del PP ha trasladado a estos responsables orgánicos que ellos “mejor que nadie” saben qué deben hacer, mientras que el equipo de Feijóo busca coordinación, un mensaje y un encuentro que llegan tras superar una etapa, la de Pablo Casado, donde se denunciaban imposiciones por parte de la dirección nacional del partido.
Además, Gamarra ha aludido en su intervención, difundida en abierto por el PP, a la rebaja del delito de sedición para poner una “alfombra roja a los independentistas que fueron golpistas”, sin mencionar expresamente ante los suyos la ruptura de la negociación para renovar el Consejo General del Poder Judicial.
