El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha pedido este jueves la intervención del Gobierno para el control de precios en sectores que “se han descontrolado de manera artificial”, como la distribución de alimentos o los hoteles.
Álvarez ha ofrecido una rueda informativa en Logroño tras participar en el “Foro SER Empresarios La Rioja”, organizado por la Cadena SER de La Rioja, acompañado por el secretario general de UGT en la comunidad riojana, Jesús Izquierdo.
El líder nacional ugetista ha recalcado que algunos precios “se han disparado con afán especulativo absolutamente insolidario con el momento actual”, por lo que ha respaldado los nuevos impuestos a la banca y a las eléctricas anunciados por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante el debate del estado de la nación.
Ha agregado que repercutir esos impuestos en los consumidores “supondría un problema del sistema. Los que dicen eso, deberían pensar en nacionalizar la banca” y, además, ha recordado que para controlar esta situación está la Comisión de la Competencia.
En su opinión, estas medidas de Sánchez “van tarde y no suponen un giro a la izquierda”, porque los gobiernos de Italia, Francia y Alemania también han fijado tasas e impuestos a las empresas del sector energético y no son ejecutivos “de ultraizquierda”.
“No estamos hablando de un proceso bolivariano ni nacionalizador. Se está planteando un cierto reparto de la riqueza para que las personas que tienen menos en este país puedan vivir un poco mejor y las que tienen mucho puedan compartir un poquito de lo que tienen”, ha reflexionado.
Álvarez ha considerado que estas medidas del Gobierno de Sánchez “van en la dirección adecuada”, pero ha sugerido presentar sus aportaciones y lograr su aprobación con “un consenso político”, de modo que la oposición debería hacer un esfuerzo para acordar las iniciativas que necesitan los ciudadanos.
Respecto al pacto de rentas, ha dicho que “las cargas de esta crisis económica deben ser repartidas lo más equitativamente posible entre todos los ciudadanos”, por lo que ha urgido a los empresarios a negociar los convenios colectivos con cláusulas de revisión salarial ante el aumento de la inflación.
“La patronal debe saber que hasta ahora hemos tenido un pequeño aperitivo que se está larvando en la sociedad si no se sientan a negociar un acuerdo de salarios que permita a los trabajadores mantener su poder adquisitivo”, ha recalcado.
En este sentido, ha reiterado su llamamiento a los empresarios “para sentarse a la mesa para desbloquear ese acuerdo o el conflicto va a ir creciendo, especialmente en septiembre y octubre, cuando se producirán movilizaciones más importantes de las que ha habido hasta ahora en este país”.
Por último, se ha referido al mensaje que lanzó el pasado 7 de julio a los trabajadores de disfrutar del verano ante la perspectiva de un otoño complicado, durante su intervención en una movilización frente a las sedes patronales en Madrid dentro de la campaña “Salario o conflicto”.
“Deseo a mis compatriotas que tengan un buen verano. A los desempleados, dentro de sus posibilidades, sin que les machaquen cada día con el mensaje de que en el mes de septiembre se va a hundir el mundo. Y los compatriotas que se van a ir de vacaciones, porque tienen medios, es bueno para el país que los gasten”, ha recalcado.
El secretario general de UGT ha dicho que no se puede consentir que “se vuelva culpar a los trabajadores de esta crisis, como sucedió en la de 2008”, cuando se argumentó que se vivía por encima de las posibilidades, algo que es “mentira”.
Por su parte, Izquierdo ha confirmado que, tras el verano, el proceso de movilizaciones de los sindicatos “irá a más” si el aumento de los salarios no se regula a través de la negociación colectiva.
