Existe en Rioja un abanico de posibilidades infinito para conocer sus rincones vitícolas más espectaculares, tanto desde las murallas de un castillo hasta los valles que nutren la región. Pero hay un lugar que desde hace pocos días está atrayendo todas las miradas.
El columpio que Bodegas Valdelana ha instalado en lo alto de una colina es uno de esos balcones con vistas panorámicas que suponen un auténtico reclamo turístico. En plena Rioja Alavesa, en el término de Elciego, se balancea una estructura de hierro sobre uno de los meandros del río Ebro y desde la que se vislumbra el paisaje vitícola riojana.
“Esto es vida, es el Ebro, es el sol, es Rioja… ¡Qué ganas de compartirlo con todos vosotros!”, anunciaba a sus seguidores la propia Judit Valdelana esta semana en los perfiles de redes sociales. Un columpio que define como el “más bonito del mundo” y que se encuentra en el Jardín de las Variedades, a tan solo un kilómetro de la bodega familiar ubicada en pleno centro del municipio, y que alberga un paraíso vitícola con más de 130 variedades de vid de todo el mundo destinadas a la investigación.
Con vosotros: ¡el columpio más bonito del mundo! ❤️. pic.twitter.com/R3Wfjyb9CJ
— Bodegas Valdelana (@BodegaValdelana) May 30, 2022
Una actividad que algún que otro turista curioso ya ha querido probar y experimentar en primera persona para vivir esa sensación de volar sobre el Ebro y un mar de viñedos que florecen poco a poco. La mayor afluencia se espera de cara a este fin de semana, y es que la bodega ya acumula varias reservas de los vecinos de comunidades limítrofes que vienen especialmente a subirse a este columpio.
“Pueden probarlo aquellos que realicen la visita de las 12:30, donde se incluye visita a la bodega, cata de vinos y el desplazamiento al Jardín de las Variedades, donde se enseña toda la variedad de vides y finalmente se visita el columpio”, explica Judit, quien aplaude la gran repercusión que ha tenido esta iniciativa, impulsada por su padre Juan Jesús Valdelana, y se muestra convencida de que este verano será una visita obligada para los amantes del vino y las buenas vistas.
