Cultura y Sociedad

Improvisar con cabeza y corazón: el equilibrio perfecto del jazz

10″Si tienes que preguntar qué es el jazz, nunca lo sabrás”. Son palabras de Louis Armstrong, una de las grandes figuras históricas de este género que lo revoluciona todo: cabeza y corazón. Un estilo, para algunos, injustamente minoritario; para otros, afortunadamente minoritario. El jazz, esa música que te reta a romper moldes, que altera todo lo fijado, que no tiene límites.

Y eso quizá sea lo que más enamora a músico y oyente. Esa capacidad de no saber qué va a suceder, esa libertad para crear en el momento, ese ir más allá de lo que está escrito. “A diferencia de otros géneros, el jazz destaca por la improvisación. A los músicos nos permite hacer una aportación más personal de lo que ya está escrito. Lo que hace el jazz es añadir a lo que ya tenemos”, explica Lluís Capdevila, músico y director del Máster en Interpretación y Composición de Jazz y Música Moderna de UNIR.

Foto: Lluís Capdevilla

A nivel de armonías y colores, este estilo cuenta con un sonido más específico, pero es la interacción y esa libertad implícita la que lo diferencia. “No todo está enlatado, en un molde o cerrado, sino que puede ser espontáneo. Puedes encontrarte con pequeños combos formados por piano, guitarra, contrabajo y batería, que sería la sección rítmica más clásica, pero, también puede intervenir un vocalista, un trompetista, saxofonista, trombonista… Cualquier instrumento tiene cabida en el jazz porque, al final, lo que importa es el contenido, lo que uno aporta”.

Hace tiempo que el jazz ya no es solo un género musical, sino una filosofía que conquista precisamente por esa independencia que otorga. A Lluís le enamoró “porque siempre me ha gustado la creatividad y esa libertad necesaria para poder expresarte. Y para el oyente es lo mismo, puede que funcione o no, pero es una música abierta donde cualquier cosa puede pasar”. Cada concierto es diferente, aunque lo protagonice el mismo grupo. “Cada ambiente, contexto y situación es diferente, e influye en la música a la hora improvisar y lo más importante, el músico interpreta según su estado”.

Pero ¿esta improvisación puede aprenderse? He aquí uno de los grandes tópicos. Para el director del Máster de UNIR la improvisación se sitúa dentro de la interpretación en los itinerarios académicos de jazz. “No se puede enseñar diciéndote lo que tienes que tocar, pero sí trabajando cómo desarrollar ideas, cómo combinarlas, enriquecerlas y crear un hilo argumental que convierta el discurso improvisado en algo atractivo para que capte la atención del oyente y genere un interés”.

Precisamente este máster persigue que el músico salga siendo mejor músico y está dirigido a profesionales y amateurs que tocan cualquier instrumento (piano, guitarra, bajo, contrabajo, batería, trompeta, entre otros) y quieren estudiar Jazz online o música moderna a distancia y así compatibilizar sus estudios con su vida personal y profesional. El rigor académico, la originalidad de sus contenidos y su enfoque práctico lo convierten en un “auténtico lujo” para todas aquellos que quieran crecer musicalmente.

Concierto de 6TEPS en la Semana Cultural de La Rioja Riojazz. Fernando Diaz

Obviamente el componente sentimental juega un papel imprescindible en el jazz, pero la cabeza no se queda atrás, aunque, ¿es preferible tener una buena base musical o sentir por encima de todo? “El equilibrio perfecto está en la combinación de ambas cosas. Puedo tener una capacidad de sentir increíble y puedo generar unos sonidos muy llamativos, pero si no tengo la técnica instrumental para poder llevar esto a alguna parte, me quedo ahí”.

Consejos para sumergirse en el mundo del jazz

Pero ¿cuáles son las cinco cosas que todo amante del Jazz tiene que conocer si quiere ser un experto? Capdevilla lo tiene claro: conocer sus orígenes afroamericanos, principales referentes, familiarizarse con el swing, los estándares y estar abierto a escuchar cosas nuevas. Con motivo del Día Internacional del Jazz (30 de abril), Lluís nos acerca a este género que gana adeptos entre la comunidad riojana.

Si el cuerpo te pide swing, empieza por aquí:

Freddie Freeloader, Miles Davis (Kind of Blue)

Blue in Green, Bill Evans & Miles Davis (Kind of Blue)

Poinciana, Ahmad Jamal

Todo merece una oportunidad, y más si se trata de música, así que, tal y como aconseja Lluís Capdevilla, escucha el jazz sin ningún tipo de condicionante; intenta borrar de tu mente cualquier opinión o idea previa; dale al ‘Play’; siente y, cuando acabe, juzga por ti mismo”.

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