El Club Taurino Logroñés, organización taurina decana de La Rioja, participó la semana pasada, junto a otras 23 entidades taurinas del resto del territorio nacional, en una reunión celebrada en el Casino de Madrid y convocada por el Foro Mazzantini para abordar un diagnóstico de la situación actual que atraviesa la fiesta de los toros en España y elaborar un plan estratégico que sirva para afrontar los graves problemas que arrastra la tauromaquia durante los últimos años.
Miguel Sáinz, quien fuera director general de Justicia e Interior del Gobierno de La Rioja entre los años 1999 y 2012 y, por lo tanto, máximo responsable regional en materia taurina durante el citado periodo, acudió en representación de la entidad logroñesa.
A modo de tormenta de ideas, los asistentes al citado foro acordaron exigir a las administraciones públicas el cumplimiento de la ley de 2013 que declara la tauromaquia como patrimonio cultural, trabajar por la unidad de todos los sectores taurinos, unificar la dispersa reglamentación taurina, reivindicar los aspectos culturales, artísticos y ecológicos de la fiesta, demandar la meritocracia de toreros y toros en la confección de los carteles, dinamizar el desarrollo del espectáculo o trabajar por un papel más activo de los aficionados, entre otras ideas.
El también exconcejal logroñés, por su parte, fue más allá y planteó la necesidad de establecer una mesa de trabajo con presencia de los diferentes estamentos que forman parte de la tauromaquia (toreros, ganaderos, empresarios, subalternos, picadores, veterinarios, periodistas…) con el objetivo de alcanzar un acuerdo de mínimos que involucre a todos los que forman parte de la tauromaquia para asegurar el buen desarrollo del espectáculo taurino durante los próximos años. Posteriormente, dicho acuerdo será trasladado a las diferentes administraciones, formaciones políticas y el conjunto de la sociedad.
La medida, que fue muy bien recibida por los participantes en la citada reunión, será analizada en profundidad y se trabajará junto a otras iniciativas que surgieron durante el desarrollo de este foro, tales como los negativos efectos sufridos por la tauromaquia tras la pandemia, la desestructuración del sector, la involucración de la juventud con la tauromaquia o el nulo papel de los aficionados en la organización de la fiesta actual.
Las peñas y clubes taurinos asistentes a este primer encuentro han sido las siguientes: Andalucía (Fundación de Estudios Taurinos de Sevilla, Federación Taurina de Jaén); Castilla-La Mancha (Peña Taurina de Tarazona de La Mancha, Albacete); Castilla-León (Asociación Taurina de Íscar, Valladolid); Cataluña (Federación de Entidades Taurinas de Cataluña); La Rioja (Club Taurino Logroñés); Madrid (Tertulia Taurina Real Casino de Madrid, Peña Los de José y Juan, Federación Taurina de la Comunidad de Madrid, Unión de Abonados de Madrid, Asociación El Toro de Madrid, Peña Antoñete, Peña El Puyazo, Unión de Bibliófilos Taurinos, Peña Cátedra Taurina UNED, Asociación esDeToros, Foro Taurino Universitario Mazzantini); País Vasco (Club Cocherito, Club Taurino de Bilbao); y entidades adheridas (Club Taurino de Pamplona, Unión Taurina de Abonados de Valencia, Club Mazzantini de Llodio y Club Taurino de Lorca).
Sin duda, un veraz ejemplo de que el Club Taurino Logroñés se codea con la élite del asociacionismo taurino nacional.
