Había pasado apenas un día desde que el Gobierno de España decretase el confinamiento de toda la población por la irrupción del COVID cuando un eslogan irrumpió con fuerza en La Rioja: “Los superhéroes no llevan capa, llevan mascarilla”. En muchos de los balcones de la región, de hecho, siguen luciendo banderolas con esa imagen, cuyo origen se explicó como una iniciativa ciudadana, cuando en realidad se trataba de una campaña institucional de la Consejería de Igualdad, por la que pagó al menos 38.540 euros, tal y como ha avanzado este viernes Radio Rioja (Cadena SER). La campaña contó con el hashtag #cuelgatubanderola en Twitter.
Esta iniciativa contravendría la Ley de Comunicación y Publicidad Institucional del propio Gobierno, que representa el marco normativo al respecto. Esta señala que debe haber “transparencia” en los medios utilizados y en el contenido de la acción comunicativa, así como “claridad” en el contenido informativo y en la existencia de elementos identificativos suficientemente claros para no inducir a confusión sobre su origen.
La consejera Raquel Romero fue la primera en difundir el vídeo que abría la campaña el 15 de marzo de 2020, un gesto que repitieron sucesivamente los directores generales de su Consejería. ¿De dónde salió salió ese vídeo? La referida emisora de radio se interesó entonces por su autoría, con vistas a entrevistar al creador de una iniciativa que circuló por WhatsApp a la velocidad de la luz y se convirtió en un himno de la pandemia.
Y volveremos a la calle Laurel pero por ahora #YoMeQuedoEnCasa pic.twitter.com/tGUWPssuUD
— Raquel Romero (@RaquelRomeroA) March 20, 2020
Preguntas que se traslaron al director de comunicación de Igualdad (hoy, director general de Transparencia), Axier Amo: “¿Estáis detrás de esto?”. La respuesta fue contundente: “No, está llegando por WhatsApp”. Aun así, el propio Amo compartió en esas fechas un mensaje ofreciendo banderolas para los interesados en colgarlas en sus balcones.
Gracias a todo el personal sanitario que nos cuida y nos cura. Hoy más que nunca, recordemos la importancia de la sanidad pública y que su personal, además de aplausos, merece respeto y condiciones y salarios dignos, adecuados a su labor y responsabilidad.#diamundialdelasalud pic.twitter.com/nQE9QSDhRs
— Sara Carreño Valero (@Saracarrenov) April 7, 2020
El citado vídeo viral aparecía como ‘oculto’ (solo las personas que conocen su ubicación pueden verlo) en un canal, ‘COVID News’, que también aloja otros vídeos institucionales de la Consejería de Igualdad, como uno en el que se celebra la reapertura de las oficinas del SAC (Servicio de Atención al Ciudadano).
En otro vídeo, una joven alerta sobre el riesgo de las ‘fake news’ sobre la pandemia que por entonces ganaba fuerza en las redes:
Radio Rioja (Cadena SER) ha confirmado que la actriz que protagoniza el vídeo era la pareja de Julio Pérez del Campo, fichado por Raquel Romero como asesor de la Oficina de Retorno. Pero, ¿cobró por ello? No hay datos al respecto.
Porque en el contrato en que se encuadra en esta campaña (que se tramitó por la vía de urgencia y se vendió como iniciativa popular) faltan datos clave (cabe recordar que se trata de la Consejería encargada de la transparencia del Gobierno) como quién diseñó las banderolas, cómo se distribuyeron y demás detalles.
“Lo volveríamos a hacer”
Ante la noticia avanzada por la Cadena SER, Raquel Romero ha lamentado en las redes sociales que “se pretenda sembrar dudas sobre nuestra gestión en la pandemia por la sencilla razón de apoyar una iniciativa comunicativa de apoyo a la sanidad pública”.
“Lo digo alto y claro, sin nada que esconder: desde la Dirección General de Participación de mi Consejeria de decidió (sic) apoyar una campaña de apoyo a los sanitarios mediante un contrato aprobado en Consejo de Gobierno. ¿Que (sic) problema hay?”, afirma Romero, quien recalca que “lo hicimos entonces y lo volveríamos a hacer porque siempre vamos a estar del lado de la sanidad pública y sus profesionales”.
En cualquier caso, la consejera no explica por qué ocultó como iniciativa popular lo que no era otra cosa que una campaña institucional.
