El Gobierno de La Rioja, a través de la Consejería de Salud, va a implementar la adaptación de los sistemas establecidos para llevar a cabo el control de la pandemia del COVID-19 en la comunidad, a partir de marzo. Así, dada la situación epidemiológica actual y la nueva estrategia de control establecida desde la Comisión de Salud Pública tras el impacto de la sexta ola, el rastreo de vulnerables desde la Unidad COVID se centraliza, a partir de ahora, en Salud Responde.
Además, el próximo 28 de febrero será también el último día en el que las unidades del Ejército desplazadas en nuestra comunidad lleven a cabo labores de refuerzo, tanto en materia de rastreo como de apoyo a la campaña de vacunación. Los militares regresan, por tanto, a sus bases de operaciones tras desempeñar un refuerzo fundamental durante el tiempo que han permanecido en nuestra región.
La consejera de Salud, María Somalo, ha agradecido su trabajo a los profesionales y militares que durante todo este tiempo han prestado servicio en la Unidad COVID de rastreadores porque “han desarrollado una labor fundamental para el control de la pandemia en La Rioja con gran entrega y absoluta dedicación”.
La Unidad COVID de La Rioja es un equipo multidisciplinar que comenzó a desplegarse en mayo de 2020 con 10 enfermeras de Atención Primaria para hacer seguimiento de los casos positivos y de sus contactos estrechos. Fue una unidad creada desde el Servicio Riojano de Salud, de acuerdo a las normas y protocolos dictados desde Salud Pública con el objetivo de no saturar las agendas de AP con el seguimiento de casos. La Rioja fue pionera en “sacar” de la Atención Primaria esta tarea a una unidad independiente.
Este equipo multidisciplinar está formado por profesionales de enfermería, microbiología, médicos en activo y eméritos, epidemiólogos, trabajadores sociales y administrativos, biotecnólogos y auxiliares administrativos, además del apoyo de los militares de diferentes misiones procedentes de Agoncillo y el País Vasco.
El objetivo de la Unidad COVID siempre ha sido garantizar la trazabilidad de los casos (salvo momentos críticos de la sexta ola siempre en torno al 90 %) y realizar las labores de seguimiento de contactos para cortar la cadena de transmisión del coronavirus con la mayor anticipación posible, junto al resto de profesionales que desempeñan estas labores.
Desde el Servicio Riojano de Salud han querido manifestar que “estamos muy agradecidos no solo por el trabajo realizado por este equipo, sino por su superación ola tras ola”. “Desde el comienzo que empezamos con 10 enfermeras hasta picos de hasta 150 personas realizando únicamente rastreo ha sido un camino largo, muy efectivo e intenso, en el que la experiencia ha ido mejorando los circuitos de trabajo de una manera muy eficiente”, manifiestan desde el SERIS.
El nacimiento de esta unidad supuso la creación por parte de la Dirección General para el Avance Digital del Gobierno de La Rioja de una herramienta tecnológica de desarrollo propio, denominada ControlCovid, que permite visualizar las cadenas de transmisión y el análisis de la evolución de la enfermedad desde una perspectiva diagnóstica y predictiva. Integra 3 herramientas: la autoevaluación online, el Gestor de Casos COVID y el Gestor COVID, que permiten realizar un seguimiento y tratamiento integral de los posibles casos.
Dada la evolución actual de la pandemia, se ha decidido reorganizar las unidades de atención telefónica para unificar todas ellas en una, en la unidad Salud Responde con personal de COVID Responde, Unidad COVID y Salud Responde propiamente dicho. Así, Salud Responde continuará con las tareas de citación para pruebas diagnósticas, para vacunación, para resolución de dudas sobre protocolos y normas COVID, certificados COVID y para el rastreo de los grupos vulnerables indicados en la estrategia definida desde Salud Pública.
