El presidente de la Asociación Riojana de Industrias Culturales (ARICU), Jesús Rocandio, ha afirmado este jueves a Efe que “la cultura fija talentos y hace que no se marchen”, ya que es un sector “que mueve muchos empleos y una cantidad de dinero importante”.
Rocandio (Logroño, 1958), también director de la Casa de la Imagen de Logroño, ha realizado estas afirmaciones con motivo de su intervención en la última sesión del ciclo ‘Conversaciones con Ñ’, organizado por el PP de la capital riojana, junto al portavoz del Grupo Municipal Popular, Conrado Escobar.
El presidente de ARICU ha señalado que, “normalmente, cuesta un poco pensar que la cultura es una industria, porque, muchas veces, la gente piensa que los que se dedican a la cultura son, como dicen por ahí, como ‘perroflautas’”. Sin embargo, “la cultura mueve una parte muy importante del Producto Interior Bruto (PIB) en España , somos un sector industrial y queremos que se nos tenga en cuenta desde ese punto de vista”, ha precisado.
También ha defendido que la cultura es “un sector industrial muy tangencial con todos los demás sectores industriales y, con el que más, con el turismo”, como ejemplifican “las operaciones que hay en otras ciudades y comunidades autónomas que tienen que ver con la industria cultural y el turismo”.
Jesús Rocandio con una de las cámaras de su colección. | Foto: Nuria Pajares.
Ha subrayado que, “desde hace mucho tiempo, nadie discute en Europa que, cuando uno entra a un museo, paga por entrar y, cuando acude a un festival, le cuesta un dinero”, puesto que “la gente paga por la cultura porque sabe que las personas que están ahí tienen que pagar impuestos al igual que el que tiene una industria de bicicletas”.
“Eso en Europa ya no se discute, entonces, me parece que aquí, en España, tiene que llegar el momento en el que todo el mundo lo sepa”, ha señalado Rocandio, quien ha apuntado que esto “no tiene que ver con que las asociaciones culturales sin ánimo de lucro también tienen que existir y deben existir”.
Según Rocandio, “España es uno de los países más piratas de Europa” y, mientras que, por ejemplo, en Francia “nadie se plantearía tener una licencia pirata de un programa, aquí es al revés”, aunque “todo el mundo sabe que detrás de hacer programa hay unas personas que tienen que cobrar”.
“Hay que desterrar la idea de que los que nos dedicamos a la cultura tenemos que hacerlo gratis, esto es lo de siempre, que la gente cree que lo que vale es lo que hace ellay no lo que hacen los demás”, ha concluido.
