Rebeca Palacios.- El vicepresidente del Colegio Oficial de Médicos de La Rioja, Fernando Martínez Soba, ha augurado este miércoles a Efe que la presión hospitalaria puede aumentar con más ingresos en los próximos días, porque se ha “infraestimado” el número real de los contagios.
Martínez Soba, presidente de la Comisión Asesora Covid de este Colegio Oficial, cree que la cresta de la sexta ola de la pandemia podría alcanzarse en los próximos días, una vez pasados entre diez y quince días desde el final de las vacaciones navideñas. Ha indicado que la situación epidemiológica de La Rioja es “muy cambiante y dinámica” y ha recalcado que no se pueden analizar solo los datos de casos activos e incidencias acumuladas porque no se han identificado todos los contagios, que son los están provocando un aumento de los ingresos hospitalarios.
A su juicio, se debería “gripalizar” la pandemia, porque “no se puede mantener este estado de alerta, incertidumbre y tensión a nivel sanitario y social”. Por ello, ha abogado por atender el coronavirus como “un virus endémico” con el que haya que lidiar diferentes olas cada año, después de que haya bajado su virulencia en esta sexta ola, a pesar de que ha tenido “una elevada capacidad de infectividad”, contrarrestada por la vacunación.
Este médico, jefe de la Unidad de Cuidados Críticos (UCI) del Hospital San Pedro de Logroño, ha demandado “medidas diferentes” para abordar la pandemia en las próximas semanas, que deberían consensuarse desde el ámbito nacional, para que todas las comunidades aborden las mismas estrategias con el fin de “endemizar” la infección por COVID-19.
Control de Enfermería en la UCI del Hospital San Pedro | Foto: Leire Díez
Respecto a la situación asistencial de la comunidad riojana, ha indicado que la transmisión comunitaria del coronavirus derivada de la variante ómicrón ha “tensionado mucho” la Atención Primaria. Así, ha explicado que los pacientes contagiados en esta sexta ola han desarrollado una “enfermedad muy leve”, pero que ha generado “una sobrecarga”, tanto asistencial como administrativa, en los centros de salud, lo que supone “un riesgo de colapso” para la Atención Primaria. Sin embargo, la atención hospitalaria actual “no tiene nada que ver con olas anteriores”, especialmente la primera y la tercera, que fueron “las más dramáticas”.
Martínez Soba recalca que el riesgo de ingresar en la UCI y desarrollar una enfermedad grave es mayor en pacientes que no están vacunados y en aquellos que son “más vulnerables”, por lo que ha insistido en apelar a la responsabilidad individual y proteger a las personas mayores o inmunodeprimidas.
128 sanitarios de baja
Respecto a la saturación de los servicios de Urgencias de los hospitales, ha pedido a los pacientes que no acudan si no tienen una enfermedad grave para que se pueda atender a los enfermos que realmente necesitan esa atención urgente. Según sus datos, a fecha de este martes, 11 de enero, un total de 128 profesionales sanitarios de La Rioja están de baja por infección activa de COVID-19 (32 médicos, 31 enfermeros, 8 celadores y unos 20 técnicos, entre otros trabajadores).
Los profesionales sanitarios que hayan sido contactos estrechos de algún contagiado entre 3 y 5 días después deben hacerse un test, pero, según el protocolo actual, tienen que ir a trabajar, ha precisado.
UCI del Hospital San Pedro | Foto: Leire Díez
“Es comprensible el cansancio físico, psicológico y emocional que arrastramos los profesionales sanitarios. Llevamos casi dos años con la pandemia, todavía no vemos la luz y no podemos bajar la guardia en ningún momento”, ha subrayado. En este sentido, ha expresado su “preocupación” por el resto de enfermedades, “más allá del COVID”, porque son pacientes que “siguen ahí y a quienes hay que atender”, con el problema de tener “sobrecargada” la Atención Primaria, las plantas del hospital y las Urgencias.
Martínez Soba ha reconocido que la gestión de la pandemia “no ha sido fácil” para los responsables políticos y administrativos de la comunidad y del país, porque la situación es “muy compleja”, dado que se ha sumado a los problemas que ya había de escasez de médicos, especialmente en Primaria, de “difícil solución a corto plazo”.
