La Rioja

La Cocina Económica, “una familia para los más vulnerables en Navidad”

La pandemia les obligó a reorganizarse, pero ningún día han faltado a su cita en los fogones más solidarios de Logroño para servir a los más necesitados. Y la temporada navideña no iba a ser menos. “Son fechas en las que todo el mundo está con sus familias y lo que buscamos es que sean unas fiestas lo más normales posibles para todos. Queremos hacer que la Cocina Económica y todos los voluntarios que la hacen posible sean como una familia para los más vulnerables en Navidad”.

Emilio Carreras, presidente de esta entidad, reconoce que esta última oleada de contagios en la región le ha asustado, “pero afortunadamente, cumpliendo con todas las medidas, han logrado seguir adelante sin incidencias a excepción de la de un cocinero. Todos los organizadores pasaron por una PCR la semana pasada y, como control regular, se mide la temperatura a todos los usuarios antes de entrar al comedor.

“La mayoría están vacunados, sobre todo los que pertenecen a los programas de Servicios Sociales porque hay contacto permanente con los trabajadores sociales. Pero para aquellos que vienen de paso desde el Centro Municipal de Acogida o están en una situación irregular es más complicado de controlar, aunque está claro que ninguna circunstancia impide que les dejemos sin comer”, sentencia.

Mario, uno de los cocineros profesionales de la Cocina Económica.

Los fogones de la Cocina Económica sigue latentes este 31 de diciembre gracias a la labor de seis cocineros profesionales que se distribuyen en tres turnos de trabajo, a las cuatro Hijas de la Caridad que todavía permanecen en el equipo, “siempre al pie del cañón”, y al resto de voluntarios que durante estas últimas semanas se han organizado en grupos burbuja para evitar contagios y prestar la atención y el mejor servicio posible para que nadie, independientemente de su situación, pase unas Navidades en soledad.

A los 365 días de servicio de comedor que ofrece la Cocina se suman los menús especiales de los días de Nochebuena, Navidad, Nochevieja, Año Nuevo y Reyes. “Este año han sido unos langostinos, pimientos rellenos, fiambre y fritos variados como entrantes, antes de pasar a un consomé y culminar con un bacalao a la riojana y cordero asado. De postre, flan, melocotón y piña, y para rematar, turrón y dulces navideños. Un menú típico de estas fechas en muchas casas riojanas y también abundante en cantidad”, destaca Carreras.

Los organizadores atendieron durante la Nochebuena y Navidad a 75 usuarios más los cerca de 60 ‘tuppers’ que entregaron a familias con menores que no acuden al comedor. “Lo que hemos apreciado desde que comenzó esta crisis sanitaria es una creciente demanda del servicio por parte de gente más joven, y también mayor presencia de mujeres”, señala Carreras.

Un espacio solidario que se coloca como el único comedor social del país que sirve las mesas como en un restaurante, sin el ‘self-service’ habitual que caracteriza al resto. “Y así seguiremos cada Navidad, cada día del año, gracias a nuestro equipo de voluntarios que cada vez se va completando con perfiles más jóvenes, lo que también es muy positivo”, destaca el presidente de la Cocina Económica.

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