Los embalses riojanos volvieron a perder agua durante la pasada semana y se mantienen por debajo del 30 por ciento de sus capacidad, en concreto al 28,1 %según la información facilitada este lunes por la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE).
El embalse de Mansilla es el que más proporción de agua mantiene, el 42 % de su capacidad, con 28,5 hectómetros cúbicos (hm3) de 67,7 posibles, tras perder casi medio esta semana; el de Pajares está al 22,8 %, con 8 hm3 de 35,2 posibles tras perder 0,37; y el González Lacasa se mantiene al 19,5 %, con 6,4 hm3 de 32,9 posibles, que prácticamente se ha mantenido sin variación esta semana.
En global, el volumen de agua embalsada en la cuenca hidrográfica del Ebro se sitúa en el 48,7 % de su capacidad, con 3.854 hectómetros cúbicos de los 7.917 que pueden albergar en su totalidad, tras perder un 0,1 % de su capacidad en la última semana.
Según los datos proporcionados este lunes por la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), en la misma semana del año pasado la situación era de 5.054 hm³, correspondientes al 63,8 % de la capacidad total.
El promedio de los últimos cinco años (2016-2020) se sitúa en el 57,6 %, con 4.563 hectómetros cúbicos.
En la actualidad, la cuenca no supera la reserva promedio de los últimos cinco años y se encuentra por debajo de la cifra de 2020, pero por encima del mínimo, que se produjo en el año 2017 con 3.305 hm³ y el 42 % del total.
Los pantanos de la margen derecha se hallan al 50 % de su capacidad con 319 hectómetros cúbicos, por debajo de la reserva de 2020, que fue de 388 hectómetros cúbicos y el 61 %, pero por encima del promedio de los últimos cinco años, que fue de 276 hm³ y el 44 %.
El mínimo de los últimos cinco años en la margen derecha se produjo en 2017, con 156 hectómetros cúbicos y el 25 % de la capacidad total de almacenamiento. La energía hidroeléctrica potencial en esta fecha es 1.917 GWh, lo que representa el 42 % de la capacidad máxima de la cuenca.
