Un grupo de vecinas de la Plaza del Mercado se han unido de manera espontánea y natural para reivindicar la situación que “estamos viviendo como habitantes de esta zona, pero estamos seguras que es extensible al Casco Antiguo y a otros puntos de la ciudad”.
Este colectivo improvisado explica que desde la apertura de la hostelería se ha priorizado el ocio de los bares, la invasión de terrazas ha sido desmesurada, el ruido entra a sus hogares hasta altas horas de la madrugada, la basura se acumula por la mañana y los vecinos “nos sentimos abandonados y pensamos que es hora de que seamos escuchados”.
Para ello llevan una semana trabajando en una acción que trata de llenar las ventanas y balcones de ristras de pimientos rojos para que todo el mundo eleve la vista y se visibilice que alrededor de esta zona de ocio diurno y nocturno hay hogares y vida. “Las terrazas inundan la zona urbana del casco. Estamos volviendo poco a poco a la normalidad y deseamos recuperar nuestra plaza de antes”.
“Nos ocupamos de recoger pimientos y nos juntamos a ensartar. Hablamos con los vecinos y les contamos la iniciativa. La gente está respondiendo porque, además de estar por la acción, la plaza luce bonita y la reivindicación es en positivo”. Durante la tarde de este viernes volverán a reunirse bajo los soportales para coser. “Y así hasta llenarlo todo de rojo pimiento. También queremos llegar al consistorio y que nos apoyen y regulen la situación donde nos sentimos tan desfavorecidos”, relatan.
Los vecinos de la Plaza del Mercado hacen vida en la plaza y se relacionan entre ellos, “reocupándonos por cómo estamos”. “Compramos en el pequeño comercio que nos rodea y entre todos formamos una red de barrio. La plaza es nuestro espacio de encuentro, de vida e intercambio natural”, añaden. Lo que desean es volver a pasear por la plaza sin tener que pedir permiso, bajar a jugar con sus hijos y pasear con los abuelos. “Salir de nuestro portal tranquilos y acceder a él sin cortinas de humo, vasos, botellas y cristales rotos”.
Para conseguirlo, piden la colaboración y apoyo de toda la ciudadanía invitándole a colgar una ristra de pimientos rojos en su balcón o ventana. “Queremos que alces la mirada a las casas para darte cuenta de que hay vida dentro de ellas. Queremos construir un nuevo escenario en torno a la Plaza del Mercado, corazón y centro de nuestra ciudad donde se visibilicen las personas y sus hogares”.
