No hay una explicación concreta y única a la excepcional situación que se está viviendo durante estas vendimias. La campaña 2021, además de por el lluvioso mes de septiembre que ha influido en las maduraciones de la uva, se ha caracterizado por una palpable falta de mano de obra. Algo impensable cuando el año pasado, el primero en el que se trabajó al amparo del COVID-19, no hubo problemas a la hora de encontrar cuadrillas.
Las estaciones de autobuses de los municipios más concurridas en años anteriores, como la de Logroño o Fuenmayor, se mostraban durante el mes de septiembre prácticamente desiertas. Apenas unos grupos de personas transitaban por sus calles los primeros días de campaña. “Nada que ver a lo de otros años”.
Y aunque los motivos no se conocen a ciencia cierta, llegó el momento de cortar las uvas y se dio la circunstancia de que muchas bodegas y agricultores no tenían suficientes manos para ello. “Varios técnicos de bodegas me transmitieron que la cosecha no iba todo lo ágil que ellos querían puesto que les faltaba gente, así que había que actuar rápido y ya no valía buscar mano de obra. Una vez detectada la necesidad, lo que hice es impulsar un grupo de WhatsApp solo para agricultores con el fin de coordinar las cuadrillas que se iban quedando libres en aquellos pueblos que habían empezado antes para que otro agricultor podría echar mano de ellas”, explica el asesor agrario David Castro.
Un grupo al que se puede unir a través de este enlace cualquier agricultor interesado en localizar una cuadrilla para la vendimia o que por el contrario ha finalizado la cosecha y sabe que estos trabajadores se quedan libres.
“Hay muchos trabajadores que terminan en un municipio e igual hasta dentro de una semana no empiezan en otro, por lo que es viable que durante esos días puedan desempeñar la labor con otro agricultor”. Y con esa intención de crear sinergias rápidas nació este miércoles el grupo Peones vendimia 2021, donde han llegado a estar hasta 210 viticultores intercambiando mensajes para ayudarse unos a otros. Actualmente hay 160 miembros en el chat y en las últimas 24 horas ocho de ellos han dado aviso de que sus cuadrillas se quedan libres porque ya están concluyendo la vendimia.
Mensajes intercambiados entre agricultores de Rioja en el grupo de WhatsApp creado por David.
Este servicio creado sin ánimo de lucro, y bajo el que “se condena cualquier tipo de subcontratación de personal”, se dio a conocer a través de la lista de difusión de David (en la que se encuentra cerca del 80 por ciento de los viticultores de Rioja), con la que trabaja desde hace varios años para acercar a los operadores la actualidad del sector vitivinícola, y que ha sacado de un apuro a más de uno durante estas semanas de plena campaña.
“Es cierto que una de las causas de la falta de mano de obra que se registrado este año puede ser el hecho de que la vendimia se haya igualado en muchas zonas de producción del país y en la propia DOCa Rioja, porque en Aldeanueva de Ebro comenzaron y pararon ante las lluvias y luego cuando retomaron ya se había empezado en zonas más tardías. Pero es cierto que en otras campañas se había dado ese solapamiento temporal con otras zonas y, sin embargo, no se apreció esta falta de mano de obra”, indica.
Algo en lo que coincide una de las miembros de este grupo de WhatsApp y que trabaja como responsable de campo en una bodega de Rioja. En su caso, continúa buscando personal, concretamente a unas 15 personas para completar la cuadrilla que ya está cortando uva. Considera que el motivo principal es que la vendimia en Rioja Oriental se ha retrasado y se ha solapado con la de zonas de Rioja Alta y Rioja Alavesa, por lo que las cuadrillas no se han podido repartir escalonadamente en el tiempo.
“En nuestra zona, que es más tardía, ha costado que la uva cogiera grado y alcanzara los parámetros deseados. Luego las lluvias también han ralentizado todo un poco más y cuando por fin la uva ha estado a punto para cortarse nos hemos topado con que no hay cuadrillas suficientes porque, o bien siguen en la Rioja Media o incluso Baja, o algunas se han ido ya al sur para comenzar la campaña de la aceituna. Estas son las consecuencias de que venga una vendimia tardía”, indica.
Mientras, los mensajes corren por el chat del grupo y la vendimia va avanzando a pasos agigantados en toda la denominación. Esta no es la primera vez que David impulsa una iniciativa similar . Ya el año pasado lanzó una herramienta digital en la temporada de la espergura, justo un mes después de la irrupción del COVID-19, con el fin de hacer frente a los problemas de mano de obra que iba a haber ante las restricciones de movilidad establecidas y así puso en contacto a gente demandante y ofertante de empleo a través de un formulario web.
Sin embargo, reconoce que “con la situación de desempleo en la que se encuentran muchas personas a raíz de la crisis del COVID-19 es sorprendente lo que cuesta encontrar trabajadores”. Además, lanza un llamamiento a la Adminstración demandando iniciativas para cubrir este tipo de necesidades aprovechando a su vez la digitalización del sector. “Lo que hago yo lo pueden hacer perfectamente ellos”.
