La Asociación Riojana de Salas de Fiestas y Discotecas ha denunciado este jueves el “abandono y desprecio” del Gobierno de La Rioja y de su Consejería de Salud, que “rechaza toda posibilidad de diálogo” y de “negociación” para adoptar medidas que garanticen un ocio nocturno seguro.
La organización empresarial ha lamentado que los establecimientos de ocio nocturno llevan 17 meses cerrados, como consecuencia “del desgobierno, la pasividad y la irresponsabilidad del Gobierno de La Rioja”. La asociación ha detallado que este jueves ha recibido “una inaudita y sorprendente” respuesta escrita de la secretaría de la Consejera de Salud del Gobierno de La Rioja tras su petición de fijar una reunión para estudiar la apertura en condiciones de seguridad de los locales.
“El escrito de la Consejería no contesta a la solicitud del sector e implica de hecho que no habrá posibilidad de establecer en ningún momento un diálogo que saque de la angustia y de la desesperación al ocio nocturno riojano y a sus familias”, han lamentado. Según esta asociación, Salud se limita a responder que como administración “expresa su máximo respeto a las decisiones judiciales”.
Los establecimientos de ocio nocturno han recordado que el pasado mayo presentaron un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de La Rioja (TSJR) y contra el nuevo Plan de Medidas Según Indicadores (PMI). Además, pidieron la adopción de medidas cautelarísimas, ya que muchas de las medidas del PMI causaban al sector “daños irreparables” y el TSJR estimó en ese momento ampliar el horario de apertura de los establecimientos hasta las 2 de la mañana.
El sector ha señalado que el Ejecutivo “puede establecer decisiones que mejoren la situación de las empresas y la protección de los jóvenes con un ocio bien canalizado y seguro, frente a los frecuentes botellones de los fines de semana, que están atrayendo a miles de jóvenes de Logroño y de otras regiones”.
A su juicio, “la única respuesta que ofrece el Gobierno es la indecisión, actitud muy característica del desgobierno. En definitiva, una tomadura de pelo y un nuevo desprecio a un sector económico de la región que emplea a 1.500 trabajadores y del que el Gobierno no quiere saber nada, porque es más sencillo dejar las cosas como están y no tomar decisiones responsables que puedan suponer una mayor prevención y proyección de la población joven, que no tiene alternativas seguras de ocio”.
Ante esta inesperada situación, “sin salida, sin presente ni futuro, sin poder atisbar siquiera una reapertura”, el sector estudiará todas las posibilidades legales que estén a su alcance para poder garantizar su supervivencia, ya que el Gobierno de La Rioja prefiere tener clausurados los locales de ocio nocturno, que nunca han sido causantes ni responsables de esta pandemia
