Las bajadas en el precio del alquiler ha provocado que el peso de las viviendas en alquiler por debajo de 750 euros haya crecido considerablemente. Si antes de la crisis sanitaria el 34 por ciento de las viviendas en alquiler anunciadas en capitales de provincia tenía un precio inferior a los 750 euros, en el mes de marzo de 2021 ese porcentaje subió hasta el 42 por ciento del total, según un estudio publicado por Idealista analizando la composición de su base de datos de vivienda en alquiler durante los meses de febrero de 2020 y marzo de 2021 en todas las capitales de provincia españolas.
El aumento del alquiler en viviendas de Logroño por debajo de 750 euros mensuales se incrementó un uno por ciento después de la pandemia y pasó de un 84 por ciento a un 85 por ciento en marzo de 2021. El incremento fue el mismo en el alquiler por debajo de los mil euros al mes, pasando a ser de un 97 por ciento en febrero de 2020 a un 98 por ciento un año más tarde.
El número de viviendas en alquiler por debajo de 750 euros mensuales se incrementó en Barcelona durante la pandemia, pasando de suponer el siete por ciento del total al 14 por ciento que suponía en marzo de 2021. Si ampliamos el rango hasta los 1.000 euros al mes, comprobamos cómo en Barcelona suponían el veintinueve por ciento de toda la oferta que hubo disponible en el mes de febrero de 2020, mientras que alcanzaron el 49 por ciento en el mes de marzo de 2021.
En Madrid, las viviendas en alquiler por debajo de los 750 euros suponían el 11 por ciento del total antes de la pandemia y actualmente suponen un 23 por ciento, más del doble. De igual manera, al subir el rango de renta hasta los 1.000 euros, la capital tenía el 36 por ciento del parque disponible por debajo de esa cifra, mientras que en el mes de marzo ha llegado a suponer el 55 por ciento del mismo.
En Palma las viviendas por debajo de 750 euros era el 11 por ciento del total, mientras que un año después de comenzar la pandemia suponían el 21 por ciento. Sobre una renta de 1.000 euros, el 41 por ciento de las viviendas en la capital insular tenía un precio inferior, frente a un 55 por ciento que lo tenía en marzo de este año.
Otras capitales
Málaga es la capital donde el peso de los alquileres de menos 750 euros más ha crecido durante el año de pandemia, pasando de representar el 46 por ciento al 65 por ciento actual. Le siguen Girona (pasa del 47 por ciento al 66 por ciento), Sevilla (del 46 por ciento al 64 por ciento) y Valencia (del 41 por ciento al 54 por ciento). También han sido considerables los aumentos de los alquileres en ese tramo de precio en Tarragona (del 65 por ciento al 77 por ciento), Granada (del 75 por ciento al 86 por ciento), Huelva (del 85 por ciento al 95 por ciento) y Las Palmas de Gran Canaria (del 51 por ciento al 60 por ciento).
De todas formas, en 5 capitales el peso de las viviendas en alquiler por debajo de los 750 euros se ha reducido. Encabeza esta lista Pamplona, donde en febrero de 2020 las viviendas por debajo de esa renta suponían el 41 por ciento del mercado disponible, y ahora suponen un 32 por ciento. Le sigue San Sebastián (pasa de 14 por ciento al 9 por ciento), Melilla (del 87 por ciento al 84 por ciento), León (del 90 por ciento al 88 por ciento) y Ourense (del 95 por ciento al 94 por ciento).
