La Policía Nacional detuvo el pasado jueves a uno de los dos presuntos autores del homicidio de Pedro José Sáez en la la calle Pepe Blanco de Logroño el pasado 18 de febrero de 2020. El Juzgado de Instrucción número 1 de Logroño ordenó su ingreso en prisión.
Las investigaciones policiales establecieron que los autores serían dos personas, una mujer y un hombre relacionados con la víctima. El móvil del crimen habría sido económico. Ella le habría estafado una cantidad aproximada de 60.000 euros mientras mantenía una relación con la víctima, por lo que fue denunciada en 2019.
Ese procedimiento judicial tenía una “vista” en fechas próximas a la fecha de la muerte de la víctima. Por ello, los investigadores creen que el autor material, inducido por la detenida, llegó la mañana de los hechos al domicilio de Pepe Blanco (número 9) donde se desencadenaron los fatales hechos.
A los dos días del crimen, el presunto autor material abandonó Logroño de forma precipitada. Dejó tras de sí una vida más o menos estable en la capital riojana y se trasladó hasta Madrid. Allí se reunió con la ahora detenida, ya que ambos mantenía una relación sentimental. Ambos permanecieron en la capital de España durante menos de 24 horas, según han constatado las investigaciones policiales.
El presunto autor material del homicidio salió de España hacia otro país, donde posteriormente sería visitado por la detenida. Allí creen que podría encontrase en la actualidad.
Detenida en Burgos
La presunta autora del homicidio llevaba vigilada en Madrid desde hacía meses. La Policía Nacional la arrestó el pasado jueves (18 horas) en Burgos. Esta se encontraba viajando en un autobús procedente de la capital riojana con dirección a la localidad castellanoleonesa. Tenía una citación judicial por otros hechos.
A la detenida, 38 años y nacionalidad rumana, le constan tres antecedentes policiales por hechos relacionado con delitos patrimoniales. En el año 2003 le constan dos en Madrid: estafa, receptación y falsificación documental en Fuenlabrada y Hortaleza. Además, en 2017 extorsión, estafa, coacciones y asociación ilícita en Logroño, cometidos en connivencia con miembros de su familia.
Las víctimas siempre eran personas de avanzada edad, aprovechándose de su “situación de vulnerabilidad” para cometer los delitos. Actualmente se encontraba residiendo en Madrid, si bien durante seis años residió en Logroño. En este momento mantuvo, al menos durante dos años, una relación con la víctima.