El Rioja

El sector vinícola se reinventa en digital ante la crisis de la pandemia

Emprender un negocio es difícil, pero hoy, tal y como están las cosas, mantenerse a flote aún lo es más. La pandemia ha traído consigo una clara necesidad de reinventarse y adaptarse a los nuevos movimientos del mercado. Y de eso sabe mucho TSMGO, The Show Must Go On, una consultoría de estrategia y operaciones riojana.

“Nuestro propósito es participar en la creación y definición de las marcas para que tengan personalidad y que desde el inicio sepan qué es lo que quieren ser de mayores, con qué propósito nacen y qué significado quieren tener para sus audiencias”, explica Ricardo Moreno, fundador de TSMGO. Ante la crisis, es esencial saber para qué están en el mundo las empresas. “Además de generar beneficios, tienen que contar con un compromiso social con el entorno en el que se mueven y con los clientes que acuden a ella”.

Un ejemplo palmario es el paso adelante que han dado varias empresas durante los últimos meses, dejando de lado su foco de negocio para aportar un plus, como las empresas de calzado riojanas que han fabricado equipos de protección o bodegas de que han producido alcohol para los sanitarios. “Para eso nace TSMGO, para ayudar a descubrir cuál es tu lugar en el mundo como empresa o como marca y, a partir de ahí, viene el despliegue: cómo se viste el niño, cómo habla y cómo se expresa, qué enunciados capitaliza y hace propios en su discurso…”.

Nuevas inquietudes en el sector del vino

Uno de los sectores que más se han ‘tenido que poner las pilas’ afrontando los estragos de la pandemia ha sido el del vino. Un universo que tiene unas peculiaridades que “debes entender y vivir para poder transmitirlas. Solo si te has manchado en la vendimia puedes ser capaz de recoger esa historia en una botella”, aclara Moreno, que antes de crear TSMGO fue director de marketing de un grupo de bodegas y proveedor del sector vinícola.

Actualmente, The Show Must Go On trabaja tanto con proyectos pequeños de varios viticultores como con bodegas más consolidadas. Iniciativas que han servido para conocer más de cerca las inquietudes que más preocupan al sector en estos momentos. “La adecuación a la nueva realidad digital es uno de los conceptos que más traen de cabeza. A muchos les ha pillado con el paso cambiado, ya que consideraban que la venta ‘online’ era algo subsidiario, de poca relevancia en su cuenta de resultados, pero a causa de la pandemia se ha convertido en una vía de proyección para muchos, consiguiendo así paliar parte de lo que se ha perdido”.

Por ello, desde hace unos meses, los proyectos de reformulación de estrategia digital orientados al comercio electrónico “están a la orden del día con el fin de que las bodegas u organizaciones sepan cómo tiene que comportarse su marca en ese entorno”.

Además, el COVID ha puesto sobre la mesa la obligación de abordar nuevos mercados. “Si tenía todos mis huevos puestos en Reino Unido y he descuidado otros lugares, ¿cómo puedo llegar a penetrar o tener una rápida llegada en esos mercados? En este sentido, TSMGO trabaja en iniciativas específicas y personalizadas para elaborar un discurso de marca adaptado al consumidor de ese país, así como el ‘packaging’ pensado para ese comprador. En resumen, una submarca para un mercado específico”.

Un sector “inmovilista”

Ante cualquier crisis es necesario percibir una luz que permita ver el final del túnel y, en esta ocasión, la pandemia ha servido para que todas las empresas se posicionen al mismo nivel. “Todas nos hemos aplanado porque hemos vivido la misma situación. Esto significa que una empresa como nosotros o cualquier bodega pequeña puede competir de tú a tú con ‘las grandes'”.

En un tiempo de incertidumbre y pocas certezas las reglas del juego han cambiado. “Todo está abierto. Si emprendes determinadas acciones nadie te asegura que vayas a acertar o a fallar, pero estamos todos igual, en una misma dinámica de ensayo y error. Así que, ¡prueba!”.

Y esto es precisamente lo que están haciendo las bodegas. Un sector que tradicionalmente ha sido “algo inmovilista y poco permeable a los cambios, y que está haciendo muchos esfuerzos por conectar de otra manera con sus audiencias. Hemos notado que la empresas vitivinícolas están más abiertas al cambio y están saliendo de esa zona de confort en la que se movían”. El replanteamiento de nuevas acciones está siendo fundamental para salir adelante.

Subir